La semana pasada desde la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat) se resolvió llevar adelante medidas de emergencia adoptadas por la crisis económica que atraviesa el sector, con servicios reducidos en el ámbito de la Capital y suspensiones y cesantías entre el personal.

Dicha medida, se podría levantar en las próximas horas, ya que los propietarios de las firmas prestatarias del servicio de ómnibus tienen en agenda a primera hora de este jueves una nueva reunión con el gobernador, Osvaldo Jaldo, en la Casa de Gobierno. Y, en caso de renovar el acuerdo con el Poder Ejecutivo (PE), los empresarios deberán cesar con la reducción en la frecuencia de los servicios -por ahora, con impacto sólo en la Capital- y con las suspensiones del personal afiliado a la Unión de Tranviarios Automotor (UTA).

El lunes, el mandatario provincial había recibido a los directivos de Aetat, luego de un fin de semana con un 70% menos de recorridos en la ciudad.

"Estamos trabajando en alternativas y seguimos insistiendo para instrumentar acuerdos dentro de la emergencia que enfrenta el transporte, buscando decisiones que eviten cualquier tipo de paro", había expresado Jaldo tras el encuentro.

Los empresarios, en tanto, se habían marchado del palacio de 25 de Mayo y San Martín confiados en los resultados que podrían tener las gestiones encomendadas al ministro de Economía y Producción, Daniel Abad, ante la Secretaría de Transporte de la Nación.

Crisis del transporte: buscan destrabar el conflicto tras la reducción de frecuencia
Los empresarios indicaron que se encuentran “ante la imposibilidad de hacer frente al costo real del servicio público de transporte de pasajeros”

Este jueves, los representantes de Aetat tienen pautada una nueva audiencia con el titular del Poder Ejecutivo. Y si bien no se habla de una solución de fondo a la crisis que afronta el sector, la intención es alcanzar un entendimiento que por lo menos permita superar este escenario.

"Las expectativas están. Y la voluntad del Gobierno provincial y de las empresas es llegar a un acuerdo temporal, hasta que tengamos las certezas de la Nación", indicó Jorge Berretta, directivo de la entidad.

En ese sentido, ratificó que la intención es lograr "la continuidad del transporte público" en Tucumán, en un momento en el cual los ingresos diarios no alcanzan para cubrir el gasoil.

"Es un día clave. El objetivo es llegar a este acuerdo con el Gobierno provincial, valorando su apoyo y con el esfuerzo del sector empresario para que no haya medidas de fuerza y podamos seguir prestando el servicio", señaló.

Berretta aclaró que, más allá de las vías de diálogo, persisten las restricciones adoptadas el viernes. Sin embargo, aclaró que, en caso de llegar a un acuerdo, "se va a volver a la normalidad, porque ese fue uno de los requisitos que transmitió el gobernador Jaldo".

Crisis del transporte: buscan destrabar el conflicto tras la reducción de frecuencia
El gremio liderado por César González se mantiene en alerta

Por su parte, el secretario general de UTA, César González mantuvo un encuentro en la jornada de ayer con el mandatario provincial y afirmó que “nos dio la tranquilidad que tomará cartas en el asunto para que cese (las suspensiones y despidos) y le encontramos una solución hasta que el gobierno nacional defina cual será la política para el transporte público de pasajeros", aseguró González.

Por lo que trascendió desde el gremio que nuclea a los choferes de colectivos, los  empresarios tendrían intenciones de avanzar con 60 despidos más y 100 suspensiones nuevas. "A medida que llegan las notificaciones los letrados de UTA están rechazando cada una de ellas", aseguró González.