La ciudad de San Miguel de Tucumán ha experimentado un cambio significativo en su sistema de transporte público a partir del 4 de julio, momento en el que entró en vigencia una nueva tarifa para el servicio de taxis. Esta modificación tarifaria fue el resultado de un proceso formal en el cual el Concejo Deliberante, en su sesión del 23 de junio, aprobó un aumento del 50% en los costos relacionados con este servicio. 

La puesta en marcha de la nueva tarifa se ha llevado a cabo en un contexto donde la intendenta, Rossana Chahla, optó por no promulgar la ordenanza mediante un decreto, lo que permitió que esta se implementara "de hecho". Esta decisión se puede interpretar como un intento de evitar una controversia política directa en un entorno económico complicado, donde el aumento de tarifas puede suscitar reacciones diversas entre la población. 

Los nuevos valores establecidos para el servicio de taxis son de $900 para la bajada de bandera y $90 por minuto de espera o cada 100 metros recorridos. 

Este aumento ha sido objeto de discusión en el ámbito político y social, dado que el concejal José María Franco, quien preside la Comisión de Transporte, ha expuesto que la solicitud de incremento provenía de los permisionarios del sector, específicamente del Sindicato Único de Trabajadores del Transporte de la República Argentina (SUTRAPPA). Franco ha explicado que este pedido fue reiterado durante varios meses, y que el análisis que condujo a la decisión de aumentar las tarifas se fundamentó en datos técnicos proporcionados por la Comisión de Transporte. 

Estas consideraciones incluyeron índices económicos oficiales, como el Índice de Precios al Consumidor (IPC), que han revelado un incremento del 50% desde abril del año anterior hasta el presente. El concejal también hizo hincapié en que el aumento de tarifas se justifica por el impacto de la inflación y el incremento de los costos operativos asociados al mantenimiento de los vehículos. Es relevante mencionar que el último ajuste en las tarifas había tenido lugar en abril del año pasado, lo que significa que la medida actual busca equiparar los ingresos de los taxistas con la realidad económica que enfrenta el sector. 

Este incremento en las tarifas de taxis en San Miguel de Tucumán plantea una serie de interrogantes sobre el futuro del transporte público en la ciudad y la capacidad de los ciudadanos para adaptarse a estos cambios en un contexto económico que continúa siendo incierto.