El Día del Maestro se celebra cada 11 de septiembre en la Argentina, con el fin de reconocer el rol de todas aquellas personas que se dedican a la educación. La jornada plantea la importancia de este cuerpo docente en el país como herramienta clave para la formación de generaciones futuras y, por tanto, el desarrollo de la sociedad.

En nuestro país, los docentes cuentan con un día de descanso durante esta efeméride.

Si bien el calendario escolar oficial marca la conmemoración de la fecha en todos los niveles - inicial, primario y secundario -, no hay una disposición nacional única que establezca que el asueto alcanza también al nivel secundario. Es decir, en la práctica cada jurisdicción determina si los niveles secundario, universitario y superior son alcanzados por el asueto o no. Este año todas las jurisdicciones extendieron el asueto también al nivel secundario, por lo que este 11 de septiembre no habrá clases en el país, aunque por cierto no será un feriado nacional.

¿Por qué se celebra hoy el Día del Maestro?

Este día rinde homenaje a Domingo Faustino Sarmiento, quien falleció el 11 de septiembre de 1888. Se trató de un educador y político cuyo trabajo significó un aporte esencial para los programas de enseñanza del país.

En 1943 se realizó la primera referencia formal a esta fecha, cuando la Conferencia Interamericana de Educación, llevada a cabo en Panamá, propuso instaurar una fecha para rendir homenaje a todos los maestros del país.

Día del Maestro: ¿qué niveles no tendrán clases hoy en Tucumán?

Sarmiento y la educación

Domingo Faustino Sarmiento dedicó su vida a promover la educación como herramienta de desarrollo. Su labor alcanzó su máximo potencial cuando fue electo Presidente de la Nación en 1868, cargo que ejerció hasta 1874. En ese período fundó más de 800 escuelas e impulsó leyes, programas e instituciones afines para el crecimiento de la tarea educativa en el país.

Promulgó la Ley de Subvenciones, mediante la cual reunió fondos para expandir la cantidad de establecimientos educativos, de los cuales el 70% eran públicos. Esto permitió que el número de estudiantes creciera de 30.000 a 110.000 durante su gestión. Sarmiento creía en la importancia de que la enseñanza alcanzara a todas las personas por igual.

Fundó la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (Conabip) y la Biblioteca Nacional de Maestros, con el objetivo de impulsar y fortalecer la investigación y la formación académica para el cuerpo docente. Invitó a profesionales de la educación provenientes de Estados Unidos para realizar un intercambio intelectual que ayudara a capacitar y acompañar al personal local.

Luego de finalizar su mandato presidencial, se mudó a Asunción, en Paraguay, donde pasó sus últimos años.

Domingo Faustino Sarmiento falleció el 11 de septiembre de 1888. Sus restos descansan en el Cementerio de la Recoleta. Sus ideas y proyectos sobre la educación sirvieron como fuente de inspiración para otros países de la región, por lo que se celebra el Día del Maestro en su honor.