En un contexto de incertidumbre laboral, el gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, lideró una reunión en Casa de Gobierno con trabajadores del ingenio Bella Vista, quienes se encuentran preocupados ante la posible desvinculación de 66 empleados. 

La convocatoria reunió a funcionarios del gabinete provincial y a representantes del municipio de Bella Vista, evidenciando la importancia del tema en la agenda gubernamental. Entre los participantes se encontraban el ministro de Gobierno y Justicia, Darío Monteros; el ministro de Economía y Producción, Daniel Abad; el secretario de Trabajo, Andrés Galván; la intendenta de Bella Vista, Paula Quiles; y varios legisladores locales. Durante la reunión, se escucharon las inquietudes de los trabajadores afectados, quienes expusieron sus temores y esperanzas respecto a su situación laboral en un momento crítico para el ingenio, que se encuentra en medio de una transición empresarial debido a negociaciones entre las compañías José Minetti y Arca Continental

El ministro Monteros destacó la complejidad del escenario actual y anunció que, al día siguiente, se llevaría a cabo una nueva reunión en la Secretaría de Trabajo, donde se discutirían posibles soluciones a la situación. Asimismo, mencionó que el Gobernador y el ministro de Economía se pondrían en contacto con los representantes de las firmas involucradas para buscar un consenso y mitigar el impacto de los despidos en los trabajadores. "El Gobierno de la Provincia va a hacer todo lo posible por destrabarlo", aseguró Monteros, enfatizando el compromiso del Ejecutivo provincial no solo con la administración pública, sino también con los sectores de la actividad privada, en particular con la economía regional del azúcar. 

Por su parte, el secretario de Trabajo, Andrés Galván, compartió detalles sobre una reunión previa con las partes involucradas, donde se intentó establecer un compromiso por parte de la industria para suspender los despidos. Según Galván, tanto José Minetti como Arca Continental afirmaron que no habría despidos, lo cual generó un alivio momentáneo entre los trabajadores. Sin embargo, la situación se tornó más compleja al indicar que la decisión de despidos provenía de Minetti, que se encuentra en un proceso de convocatoria de acreedores. 

La incertidumbre en torno a la situación laboral del ingenio Bella Vista fue subrayada por el secretario Jose Leguizamón, quien manifestó su preocupación por las repercusiones que los despidos pudieran tener en las familias de los trabajadores. Aunque se espera que las inversiones lleguen a la región, Leguizamón insistió en que estas no deben realizarse a expensas de la estabilidad laboral de los empleados. Así, el encuentro en Casa de Gobierno se convirtió en un espacio para el diálogo y la búsqueda de soluciones, en un marco donde la incertidumbre persiste. 

La situación del ingenio Bella Vista, emblemático para la economía tucumana, seguirá siendo objeto de atención por parte de las autoridades y de la comunidad, en un esfuerzo por garantizar la protección de los derechos laborales de sus trabajadores y la continuidad de la actividad económica en la región.