El Gran San Miguel perderá la cuarta rotonda
A las tres ya quitadas en Yerba Buena, se le sumará la de Tafí Viejo, la cual pasará a ser un cruce semaforizado.
En el Gran San Miguel, el fenómeno del caos vehicular parece estar ganando terreno frente a la intención inicial de las rotondas, que fueron concebidas para organizar el tránsito y facilitar los cruces de manera más fluida. Sin embargo, la realidad actual plantea un desafío significativo: muchas de estas estructuras terminan generando más complicaciones que soluciones, sobre todo durante las horas pico, cuando el volumen de vehículos en circulación aumenta considerablemente.
Expertos en tráfico han señalado que el principal problema radica en la falta de cumplimiento de las normas de tránsito por parte de los conductores. En particular, se destaca la dificultad que enfrentan muchos al respetar la regla fundamental de ceder el paso a aquellos vehículos que ya se encuentran dentro de la rotonda. Esta falta de respeto hacia las normas ha llevado a las autoridades a tomar decisiones drásticas; en la última década, se han eliminado tres rotondas en la región.
A esta lista se sumará pronto la rotonda situada en la intersección de la avenida Perú y la avenida Roca, en el municipio de Tafí Viejo, una zona de gran relevancia, especialmente durante la temporada de zafra citrícola, que se caracteriza por un aumento notable del tránsito pesado. La decisión de eliminar esta rotonda se fundamenta en la intención de construir un cruce semaforizado que, según se espera, mejore la circulación en la zona. Cabe mencionar que en este lugar se erige un monumento en homenaje a los caídos en la Guerra de Malvinas, y sus representantes han acordado el traslado del mismo antes de que inicien las obras. Así, esta rotonda se convertirá en la cuarta eliminada en el área metropolitana, lo que refleja un cambio en la estrategia para abordar los problemas de tránsito.