La reciente decisión de la Unión de Tranviarios Automotor (UTA) de Tucumán de llevar adelante un paro este miércoles, en horario sorpresa y por tiempo indeterminado que afectará el transporte público en San Miguel de Tucumán, generó una ola de críticas. Las líneas municipales, que actualmente ofrecen un servicio ya limitado, operarán a partir de ese día con la misma frecuencia que los domingos. 

Este cambio, claramente, generó una serie de reacciones sobre todo en el arco político. El concejal José María Franco, presidente de la Comisión de Transporte del Concejo capitalino, se mostró sorprendido por el anuncio empresarial y, en particular, porque la medida de reducción de los servicios sólo alcance a las líneas de San Miguel de Tucumán.

“Me parece raro que hayan tomado la decisión si el problema es empresarial, entonces debería ser en toda la provincia. Analizado de esa forma, parece un gran pedido solo al municipio de San Miguel de Tucumán”, dijo.  “Es algo que nos sorprende, sabemos que el sector está en crisis pero nos parece muy extrema esta situación. Ojalá se puedan solucionar las cosas”, afirmó. “Estamos esperando qué información nos hace llegar Aetat por haber tomado esta decisión. No teníamos noticias de esto”, añadió el edil.

En el Concejo Deliberante todavía está en análisis el pedido de incremento tarifario solicitado por los empresarios. Según el estudio de costos, el valor del boleto urbano debería rondar los $ 1.500, respecto de los $ 690 actuales. Por ahora, no hay fecha para su tratamiento.

Los empresarios también hicieron hincapié en la falta de políticas de estado que involucren a todos los actores: el poder concedente, el municipio, los empresarios y, por supuesto, los usuarios. "Nos piden renovar unidades y mejorar los servicios, pero si deben dar una tarifa de 10, nos dan 5. Es inconcebible, no se entiende por dónde quieren ir", comentó uno de los voceros.

En cuanto a la posibilidad de mejorar el servicio, los empresarios fueron claros: "No podemos hacer magia. Nos demonizan, pero somos los mismos que en 2015, 2016, 2017 invertimos sumas millonarias en nuevas unidades. Hoy no podemos hacer lo mismo porque estamos endeudados, muchos de nosotros con moratorias de AFIP debido a la pandemia".

"Seguimos prestando el servicio porque no hay nadie más que lo haga, pero la situación es insostenible", expresó Jorge Berretta, quien señaló que la Línea 3 podría dejar de operar. "El servicio de la Línea 3 es complicado, es malo, pero no tenemos posibilidad de renovarlo. En las condiciones económicas actuales, los números no alcanzan para mantener la prestación del servicio", añadió.

La crítica también se dirigió al municipio de San Miguel de Tucumán, al que acusaron de ignorar el problema. "El único gesto que recibimos es que nos ignoren. Esto lo digo con el mayor de los respetos hacia todos los funcionarios. Ignorar el problema solo lo agrava y abona el terreno para que traigan a otros empresarios en condiciones más favorables", expresó uno de los dueños de líneas de colectivos.

Finalmente, los empresarios dejaron en claro que la reducción del servicio es irreversible si no se toman medidas que incluyan concesiones, actualización tarifaria y compensaciones adecuadas. "Hoy en día, perdemos plata cada vez que salimos a la calle. Somos deficitarios y el déficit se sigue acumulando", concluyeron.