El periodista Emanuel Herrera mostró en su cuenta de Twitter una foto con los hematomas que le provocó la seguridad personal del expresidente Mauricio Macri cuando hablaba con la prensa, tras emitir su voto en las últimas Elecciones Legislativas 2021. Según su relato, él fue agredido con «tres trompadas«. «No me dejaron hacer mi trabajo», sostuvo en un posteo. «Pensé que fue un hecho menor, pero había sido que me cagaron a trompadas», sostuvo en modo irónico en una publicación en Instagram.

“Al principio pensé que fue una nimiedad. De hecho, mi primera reacción fue subestimar y decir, ironía mediante, que ‘sólo fueron tres trompadas en el estómago’. Bueno, con el correr de los días, se formaron los hematomas. Así está hoy”, relató Emanuel Herrera en un posteo que realizó en su cuenta de Twitter. El cronista fue agredido el último domingo a la salida de la votación de Macri en la Escuela Wenceslao Posse en el barrio de la Ciudad de Buenos Aires de Palermo.

Acto seguido, reconoció que dudó en subir las imágenes de cómo se encontraba su cuerpo tras los golpes de puño recibidos por la seguridad privada del exmandatario nacional. “No voy a negar que me da vergüenza, que me resulta incómodo estar en esta situación. Pero pienso, ¿qué hice? Sólo fui a hacer mi trabajo”, continuó Herrera en un posteo realizado ayer en sus redes sociales. “Lo que me pasó no fue normal y que sentí que debí hacerlo público desde el primer momento para que no vuelva a repetirse y no le pase a nadie más”, añadió.

En esta línea, aseguró que en el medio “hubo de todo” tras contar sobre lo que sufrió. “Hubo de todo: desconfianza, teorías conspirativas y mucha, mucha solidaridad. Me quedo con esto último: con las decenas de mensajes que recibí con muestras de afecto. Colegas de la calle, excompañeros de trabajo y dirigentes políticos de todos los sectores, excepto Juntos por el Cambio”, remarcó Emanuel Herrera. “Fui a cubrir la votación del expresidente Mauricio Macri y su seguridad me agredió. Pensé que fue un hecho menor, pero había sido que me cagaron a trompadas”, cerró.

Es el segundo hecho con un periodista por el que se encuentra vinculado el expresidente. Es verdad, este último ocurrió con su seguridad privada, pero su nombre está en el medio. El primero sucedió a finales de noviembre cuando tiró al suelo un micrófono de C5N. Por este, fue denunciado en una comisaría de Dolores. A diferencia de lo ocurrido con el caso Emanuel Herrerea, el expresidente pidió disculpas, aunque en sus apariciones mediáticas posteriores le echó la culpa al propio cronista Nicolás Munafó.

Fuente: El Intransigente