En un reciente pronunciamiento, Gabriel Gusso, secretario gremial de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), expresó una postura clara respecto a las demandas salariales de los choferes de colectivo. Gusso hizo hincapié en la necesidad de alcanzar un salario de dos millones y medio de pesos, señalando que, de no concretarse en el transcurso del día, el gremio podría decidir avanzar hacia un paro por tiempo indeterminado. 

Durante su intervención, Gusso solicitó la intervención directa del presidente Javier Milei, sugiriendo que este debería comunicarse con Roberto Fernández para asegurar los fondos necesarios. "Ya no queremos más promesas", enfatizó, reflejando la creciente presión que se siente dentro del gremio. Según el dirigente, las bases están demandando al Consejo Ejecutivo Nacional un plan de acción que se iniciaría con una asamblea. 

La situación descrita por Gusso pone de manifiesto la firmeza del gremio en su postura, indicando que, si no se atienden sus reclamos, se procederá con el paro propuesto. "Vamos a ir para adelante, no vamos a dar un paso para atrás. Estamos firmes", concluyó, resaltando la determinación del sector en la búsqueda de respuestas a sus demandas laborales.