Escándalo en el juicio por la muerte de Maradona
Durante las audiencias, los abogados defensores descubrieron a dos personas que, sospechosamente, filmaban todo lo ocurrido en el juicio.
La causa judicial que investiga las circunstancias que rodearon la muerte de Diego Armando Maradona ha capturado la atención de la sociedad argentina, no solo por la figura icónica que representa el fallecido, sino también por las implicancias legales y las controversias que han surgido a lo largo del proceso. En este marco, se ha desatado un nuevo incidente que ha generado preocupación en el ámbito judicial: la supuesta entrada de individuos no autorizados a la sala de audiencias con el objetivo de grabar imágenes, presumiblemente para un documental.
El abogado Rodolfo Baqué, quien representa a uno de los implicados en el juicio, ha solicitado la grabación de las primeras jornadas del debate, en un intento de esclarecer la situación. El trasfondo de esta solicitud se encuentra en una denuncia penal que investiga si la jueza a cargo, Julieta Makintach, otorgó autorización para que dos o más personas realizaran un documental en las instalaciones del tribunal. Esta situación se complica aún más debido a que la productora en cuestión estaría vinculada a la familia de la jueza, dado que su hermano, Juan Makintach, ocupa el cargo de gerente en dicha empresa.
Los abogados y fiscales que participan en el caso han expresado su preocupación por el hecho de que, si efectivamente se estaba grabando para un documental, se estaría incurriendo en una violación de las normativas que prohíben la grabación dentro de la sala de audiencias. En este contexto, las imágenes obtenidas de manera ilícita podrían tener un valor comercial significativo en el futuro, lo que añade una capa de complejidad a la ya intrincada situación. De este modo, el juicio no solo se limita a esclarecer las responsabilidades penales en torno a la muerte de Maradona, sino que también se ve envuelto en un torbellino de controversias mediáticas y legales que continúan alimentando el interés público.
La evolución de este caso promete seguir siendo un tema de debate en la sociedad argentina, a medida que se desvelen más detalles sobre las implicaciones de la denuncia y la naturaleza de las grabaciones realizadas.