Las enseñanzas que dejó el General José de San Martín
Las máximas del prócer para su hija Merceditas, dignas de ser enseñadas en todos los hogares y en todas las escuelas. Un verdadero código de ética.
José Francisco de San Martín y Matorras? ?fue un militar y político argentino, y uno de los libertadores de Argentina, Chile y Perú. Es una de las dos figuras más trascendentes de las guerras de independencia hispanoamericanas junto a Simón Bolívar.
En Argentina se lo reconoce como el Padre de la Patria? y el Libertador,? y se lo valora como el principal héroe y prócer del panteón nacional. En Perú también se lo recuerda como el Fundador de la Libertad del Perú, el Fundador de la República, el Generalísimo de las Armas y el Protector del país. ?El Ejército de Chile le reconoce el grado de capitán general.
Es así que todos los 17 de Agosto conmemoramos la muerte del gran libertador de América. Falleció a la edad de 72 años, a las tres de la tarde del 17 de agosto de 1850 en compañía de su hija, de su yerno y sus nietos.
En “Máximas para mi hija”, el Libertador dejó escrito un verdadero código de ética y un modelo de educación para los jóvenes.
Merceditas nació en Mendoza el 24 de agosto de 1816, cuando su padre era gobernador de esa provincia y estaba en plena preparación del Ejército de los Andes para la Campaña Libertadora. Ella tenía solo cuatro meses cuando el Libertador inició el cruce de Los Andes y pasó los primeros años de su vida en Buenos Aires al cuidado de su madre. Tras la muerte de Remedios, estuvo a cargo de Tomasa, su abuela materna.
La hija de San Martín recién volvió a ver a su padre siete años más tarde, cuando después de Guayaquil, el General decidió dar un paso al costado en la lucha por la liberación de América, quedando esta en manos de Simón Bolívar, y volvió a su Patria.
Hacia 1825 San Martín se encuentra instalado en Bruselas, “lo barato del país y la libertad que se disfruta” lo han decidido a quedarse allí hasta tanto finalice la educación de su hija. Como en esta, en muchas otras comunicaciones allende el Atlántico, el gran capitán expresaba a sus amigos: O’Higgins y Guido, su permanente preocupación y desvelos por la educación de Mercedes, asegurando que “La mutación que se ha operado en su carácter es tan marcada como la que ha experimentado en figura”.
Por esos años escribirá las Máximas para mi Hija, que hoy bien pueden ser consideradas un verdadero código de ética y un modelo de educación para los jóvenes, pero que en realidad demuestran el carácter sencillo, simple, austero y ejemplar de este padre cariñoso y severo, responsable y prudente que transmitirá a través de sencillas frases, su filosofía de vida, a su amada hija.
Las máximas de San Martín a su hija Mercedes que todos debemos recordar
1. Humanizar el carácter y hacerlo sensible aún con los insectos que nos perjudican. Sterne ha dicho a una mosca abriéndole la ventana para que saliese: “Anda, pobre Animal, el Mundo es demasiado grande para nosotros dos”.
2. Inspirarla amor a la verdad y odio a la mentira.
3. Inspirarla gran Confianza y Amistad pero uniendo el respeto.
4. Estimular en Mercedes la Caridad con los Pobres.
5. Respeto sobre la propiedad ajena.
6. Acostumbrarla a guardar un secreto.
7. Inspirarla sentimientos de indulgencia hacia todas las Religiones.
8. Dulzura con los Criados, Pobres y Viejos.
9. Que hable poco y lo preciso.
10. Acostumbrarla a estar formal en la mesa.
11. Amor al Aseo y desprecio al lujo.
12. Inspirarla amor por la Patria y por la Libertad.