Una jornada histórica se vivió ayer en el sur provincial. La Diócesis de la Santísima Concepción cumplió 58 años este jueves y lo celebró con la ordenación del nuevo obispo, Monseñor José Díaz, quien tomó la vacante dejada por el recordado José Melitón Chávez.

“Es ponerme al servicio, que la gente sepa que estoy al servicio de ellos”, fueron las primeras palabras que dijo el “Padre Pepe” sobre su nuevol rol dentro de la comunidad católica de Tucumán, en diálogo con Los Primeros por Radio 10. El obispo habló sobre las tareas que deberá realizar en todo el sur provincial, que incluye entre otros lugares, Monteros, Leales, Simoca, Graneros, Chicligasta, Graneros, La Cocha, Concepción, Río Chico, entre otras localidades.

“En primer lugar el obispo es sucesor de los apóstoles y tiene la función de gobernar y santificar la propia diócesis siendo comunión y unión entre todos dentro de la iglesia. Ojalá pueda ser generador de diálogo, la gente está necesitada de una cultura del encuentro, está cansada del distanciamiento”, manifestó Monseñor Díaz.

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