La lengua de suegra, conocida científicamente como Sansevieria, es una de las plantas más populares en las casas de los argentinos. Su resistencia y capacidad para adaptarse a diferentes condiciones la convierten en una opción ideal para quienes no tienen mucho tiempo para el cuidado de plantas.

Sin embargo, para que luzca siempre espléndida y vibrante, es fundamental saber cuándo es el momento adecuado para podarla.

Cuál es el mejor momento para podar la lengua de suegra

A diferencia de otras plantas que requieren cuidados frecuentes, la lengua de suegra no necesita ser podada ni semanal ni mensualmente. El momento ideal para realizar esta tarea es durante la primavera. En esta estación, la planta se encuentra en su fase de crecimiento activo, lo que facilita su recuperación y asegura un crecimiento saludable.

Podar en primavera permite eliminar hojas secas o dañadas, promoviendo un aspecto más estético y vigoroso. Además, al hacerlo en esta época, se estimula la producción de nuevas hojas, lo que contribuye a que la planta se vea más frondosa y atractiva.

Para evitar enfermedades o plagas, lo ideal es podarla en primavera. (Foto ilustrativa generada con IA)
Para evitar enfermedades o plagas, lo ideal es podarla en primavera. (Foto ilustrativa generada con IA)

Por qué es importante podar en el momento adecuado

Podar la lengua de suegra en el momento adecuado no solo mejora su apariencia, sino que también previene problemas de salud en la planta. Al eliminar las hojas dañadas, se reduce el riesgo de enfermedades y plagas que pueden afectar su desarrollo.

Además, una poda adecuada permite que la planta concentre sus recursos en las hojas sanas, optimizando su crecimiento. Al momento de hacerlo, se recomienda usar:

  • Tijeras de podar pequeñas o tijeras de jardín bien afiladas.
  • Cuchillo de hoja rígida y afilada.

Se sugiere usar guantes de jardinería, para evitar el contacto directo con la savia, que puede causar irritación en algunos tipos de pieles.

Cómo estimular el crecimiento de la lengua de suegra después de la poda

Después de podar una lengua de suegra, es importante tomar ciertas medidas para ayudar a que la planta se recupere rápido y crezca con fuerza. Aunque esta especie es muy resistente, un buen cuidado puede acelerar su desarrollo.

Uno de los principales consejos es ubicarla en un lugar con luz indirecta brillante. Si bien tolera la sombra, la exposición adecuada estimula la aparición de nuevas hojas. Además, conviene regarla de forma moderada, solo cuando el sustrato esté completamente seco. Un exceso de agua podría pudrir las raíces y frenar su crecimiento.

El uso de un fertilizante suave para cactus o suculentas, aplicado una vez por mes durante la primavera y el verano, también favorece el rebrote. En lo posible, hay que evitar moverla de lugar de forma constante, ya que los cambios bruscos de temperatura o luz pueden estresarla.

Por último, si al podar se guardaron hojas sanas, estas pueden enraizarse en agua o tierra para obtener nuevas plantas. De esta forma, no solo se regenera el ejemplar original, sino que se multiplica.

Una planta noble que también se puede reproducir fácilmente

Si se realiza la poda con cuidado, la lengua de suegra no solo mejora su aspecto, sino que también brinda la posibilidad de obtener nuevos ejemplares a partir de hojas sanas. Colocándolas en agua o directamente en tierra húmeda, es posible enraizarlas y comenzar el crecimiento de otra planta. Esto convierte a la Sansevieria en una de las especies más agradecidas del mundo vegetal: resistente, estética y capaz de multiplicarse sin necesidad de gastar dinero.

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