El Feng Shui es una antigua disciplina de origen chino que busca armonizar los espacios para favorecer el bienestar, el equilibrio y la prosperidad en la vida cotidiana. A través de la distribución del mobiliario, la elección de los colores, la orientación de los objetos y, sobre todo, la circulación de la energía, esta filosofía propone convertir cada ambiente en un refugio energético.

Uno de los aspectos fundamentales en el Feng Shui es la iluminación. La luz no solo permite ver, sino que también representa vitalidad, presencia y flujo de energía. Por eso, cuando en una casa se queman varias lámparas de forma repentina o repetida, muchos empiezan a preguntarse si hay algo más que una simple falla técnica. Y aunque la respuesta puede parecer supersticiosa, el Feng Shui tiene una explicación.

Feng Shui: por qué se queman las lámparas de luz

Según el Feng Shui, cuando las lámparas o focos se queman de manera frecuente, podría tratarse de una señal de desequilibrio energético en el hogar. La luz representa claridad, energía vital y renovación. Su interrupción repentina puede reflejar tensiones acumuladas, bloqueos emocionales o incluso un exceso de energía densa en determinados espacios.

Esta disciplina sostiene que todo lo que ocurre en el entorno tiene un reflejo interno, y viceversa. Por eso, la quema de lámparas puede estar asociada a momentos de estrés, conflictos familiares, emociones reprimidas o cambios energéticos bruscos. En algunos casos, incluso puede interpretarse como una advertencia para revisar qué está pasando en nuestra vida y qué aspectos necesitan más atención o limpieza energética.

El Feng Shui también considera la ubicación de la lámpara que se quema. Si ocurre en una zona vinculada al trabajo, puede indicar sobrecarga o frustración laboral. Si es en el dormitorio, se relaciona con la vida emocional o la falta de descanso. Y si es en la entrada, puede estar sugiriendo una dificultad para dejar entrar nuevas oportunidades o personas.

Más allá de lo simbólico, los expertos en Feng Shui recomiendan observar estos signos con apertura pero sin paranoia. Es clave revisar la instalación eléctrica, claro, pero también se sugiere ventilar los ambientes, limpiar profundamente el área donde se quemó la lámpara y, si se desea, encender una vela blanca o colocar cristales para restablecer la armonía.

Cuál es la mejor iluminación para el hogar, según el Feng Shui

Para esta filosofía oriental, la luz natural siempre es la más recomendable. Abrir las ventanas, permitir que entre el sol y evitar obstrucciones es una forma directa de elevar la energía del hogar. En caso de no contar con mucha entrada solar, se aconseja elegir luces cálidas y suaves, que no generen contrastes violentos ni zonas de penumbra.

El Feng Shui también sugiere evitar las lámparas rotas, sucias o con bombitas fundidas. Todo objeto deteriorado interrumpe el flujo de energía positiva y puede influir negativamente en el ánimo de quienes habitan el lugar. Mantener la iluminación en buen estado es parte del mantenimiento emocional del hogar.

Tucumán. Con una serie de lámparas que reproducen su provincia, Carlota Beltrame representa el Bicentenario.

Tucumán. Con una serie de lámparas que reproducen su provincia, Carlota Beltrame representa el Bicentenario.

En espacios de trabajo o estudio, las luces deben ser claras y dirigidas, sin encandilar ni generar fatiga visual. En cambio, en áreas de descanso como el dormitorio o el living, la iluminación debe ser tenue y relajante, ideal para propiciar el descanso y la calma.

Por último, los colores de las lámparas también influyen. Las pantallas blancas o beige ayudan a expandir la luz de forma pareja, mientras que los tonos rojos o naranjas pueden activar la energía, siendo útiles solo en sectores específicos. En definitiva, iluminar el hogar es, según el Feng Shui, una forma de iluminar la vida.