Una isla africana pidió ayuda de la Argentina: “Tenemos un lazo histórico y una historia común”

Orlando Cartagena Lagar, autoproclamado “primer ministro” de un gobierno en el exilio de la isla de Annobón, ha manifestado su preocupación por lo que califica como un “exterminio” y violaciones sistemáticas de derechos humanos por parte del régimen de Guinea Ecuatorial. En los últimos días, la situación de la pequeña isla africana ha captado la atención de la comunidad internacional, incluida Argentina, en busca de visibilizar la crítica situación humanitaria que sus habitantes enfrentan desde hace años.

La Isla de Annobón y sus condiciones de Vida 

Annobón es una isla remota de 17 kilómetros cuadrados, ubicada en el océano Atlántico, al sur del archipiélago de Santo Tomé y Príncipe. La población de la isla ha comenzado a hacer un llamado a la comunidad internacional, especialmente al gobierno argentino encabezado por Javier Milei, para que se brinde apoyo en la denuncia de violaciones de derechos humanos perpetradas por el gobierno dictatorial de Teodoro Obiang Nguema Mbasogo.

Según declaraciones de Cartagena Lagar, los habitantes de Annobón viven en condiciones extremas de miseria. La falta de servicios básicos como agua potable, atención sanitaria, electricidad y educación se ha agudizado, lo que ha llevado a muchos a describir la situación como una crisis humanitaria sin precedentes. Además, se menciona que la presencia militar en la isla ha generado un ambiente de abuso y temor entre la población.

Historia Política y Lazos Históricos

El 8 de julio de 2022, los líderes de Annobón declararon la independencia de manera unilateral, aunque hasta la fecha no han recibido reconocimiento formal de otros estados. Sin embargo, lograron incorporarse como miembros de la UNPO, una organización que representa a naciones y pueblos no representados ante la ONU. Cartagena Lagar destacó la importancia de los lazos históricos con Argentina, al mencionar que Annobón fue parte del Virreinato del Río de la Plata.

Se estima que aproximadamente 20.000 habitantes han abandonado Annobón debido a la falta de recursos y la crisis humanitaria, dejando solo alrededor de 2.000 personas en la isla. La población se ve obligada a subsistir con la pesca artesanal y cultivos de tubérculos, lo que resulta insuficiente ante la situación actual. Cartagena Lagar describió esta realidad como un acto de terrorismo y genocidio contra su pueblo.

Intervención Internacional y Represión

A pesar de las denuncias sobre la violencia política y los abusos en Annobón, la atención internacional ha sido limitada. Un informe del Consejo de Seguridad de la ONU menciona el uso excesivo de la fuerza en la represión de protestas por parte del gobierno ecuatoguineano. Durante estos incidentes, la conectividad a internet fue interrumpida y varios isleños fueron detenidos, lo que ha sido objeto de preocupación por parte de organismos de derechos humanos como Amnesty International y el Grupo de Trabajo de la ONU sobre la Detención Arbitraria.