Atlético dominó, pero empató con Rosario Central
En un Monumental repleto y con la presencia de Ángel Di María, el "Decano" impuso condiciones y generó las mejores chances, pero la falta de precisión en el último toque dejó el marcador en cero.
La noche tenía un condimento especial: debut de visitantes en el José Fierro y la llegada de Ángel Di María. Sin embargo, el partido se escribió desde la táctica. Lucas Pusineri plantó un Atlético Tucumán con Matías Mansilla firme en el arco, línea de tres centrales (Marcelo Ortiz, Clever Ferreira y Miguel Brizuela), laterales proyectados con Maximiliano Villa e Ignacio Galván, un mediocampo de recuperación y pase corto con Kevin Ortiz, Lautaro Godoy y Adrián Sánchez, y una dupla ofensiva con Leandro Díaz y Mateo Bajamich. La premisa era clara: ganar por las bandas, recuperar rápido y finalizar las jugadas.
El plan funcionó: el “Decano” progresó por los costados, apretó arriba y generó las oportunidades más peligrosas. La más clara llegó tras una jugada de Galván, que cortó y rompió líneas para asistir en una acción que terminó en gol, anulado por una falta previa de “Loco” Díaz sobre Enzo Giménez. También hubo un remate de Ferreira desviado por la defensa, un mano a mano que Díaz no pudo concretar ante Jorge Broun y un intento de Godoy tras un contragolpe de Bajamich. El dominio era local, el marcador no.
Central, dirigido por Ariel Holan, sintió la presión y ajustó en el segundo tiempo. Apostó a enfriar el ritmo y cuidar la racha de valla invicta. Aun así, Atlético siguió atacando. La única concesión seria del local fue una mala salida que dejó a los rosarinos frente al gol, pero el remate se fue ancho. El mediocampo “decano” volvió a imponerse con Ortiz y Sánchez cerrando líneas, y Marcelo Ortiz ganando los duelos defensivos.
Pusineri movió el banco y pasó a un 4-4-2 para darle aire fresco a las bandas. Nicolás Laméndola, ingresado a los 68’, tuvo una buena chance cerca del final con un remate que se fue desviado. Atlético siguió empujando, pero la red se negó a moverse.
El 0-0 se explica en la precisión que faltó para concretar y en la prudencia visitante. Central priorizó no perder y administró el riesgo; Atlético generó para ganar, pero le faltó el toque final.
La conclusión deja un mensaje claro: la idea de Pusineri ordena y produce. Cuando la definición acompañe, el resultado reflejará mejor el juego. El empate dejó la sensación de que el “Decano” estuvo más cerca, pero esta vez, el cero pesó más que la ambición.