En el marco de la fecha 16 del torneo boliviano de Primera División, The Strongest logró una victoria por 3 a 2 ante Blooming en el estadio Hernando Siles de La Paz. A pesar del resultado favorable para el equipo local, el partido se vio empañado por un acontecimiento lamentable que involucró a sus hinchas.

Este incidente culminó con un jugador herido en el terreno de juego, lo que generó preocupación tanto en el ámbito deportivo como en la comunidad en general. Apenas cuatro minutos antes del final del encuentro, desde la curva sur, donde se ubica la barra brava conocida como Ultra Sur, se comenzaron a lanzar bengalas y petardos hacia el campo. Uno de estos proyectiles impactó en la pierna del delantero Juan Godoy, quien requirió atención médica inmediata.

 La situación llevó a varios jugadores de Blooming a adoptar posiciones defensivas en el suelo por precaución, aunque no se registraron otras lesiones de gravedad durante el incidente. El árbitro del encuentro, Bruno Vera, tomó la decisión de suspender temporalmente el partido hasta que las fuerzas de seguridad pudieran restablecer el orden en la sección afectada.

Bolivia: La barrabrava de The Strongest hirió a sus propios futbolistas con bengalas en pleno partido

 Este tipo de incidentes no son aislados y reflejan una tensa relación entre la barra Ultra Sur y la directiva del club. Según informes de medios locales, estos hinchas exigen la renuncia del presidente Daniel Terrazas, lo que podría haber influido en el comportamiento agresivo observado en las gradas. 

En respuesta a lo sucedido, Daniel Terrazas anunció su intención de presentar una denuncia ante el Ministerio Público, acompañada de pruebas que demuestren el accionar violento de algunos individuos en el estadio. Aunque mencionó a un supuesto responsable identificado como Fabricio Vargas, también solicitó las grabaciones de las cámaras de seguridad del Servicio Departamental de Deportes (Sedede) para respaldar su denuncia.

 La situación plantea la posibilidad de sanciones severas para The Strongest, que podrían incluir multas significativas que oscilaría entre 8.250 y 275.000 bolivianos (aproximadamente entre 1.100 y 25.000 dólares estadounidenses), y hasta la pérdida de puntos, dependiendo de la evaluación de la Federación Boliviana de Fútbol.