El regreso de Ángel Di María al fútbol argentino tuvo de todo: emoción, gol, polémica, lesión y un cierre frustrante. Rosario Central empató 1-1 ante Godoy Cruz en el Gigante de Arroyito, por la primera fecha del Torneo Clausura, en un partido cargado de expectativa por el retorno de su hijo pródigo.

Después de 18 años, Fideo volvió a vestir la camiseta auriazul y se reencontró con su gente. Su actuación fue destacada: convirtió de penal el 1-0 a los 31 minutos del primer tiempo, tras una infracción discutida dentro del área. Fue un momento de desahogo, celebración y emoción en las tribunas.

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El gol del "Fideo" para el 1-0 a favor de R. Central.

Pero la alegría duró poco. Di María pidió el cambio visiblemente dolorido, tras sentir una molestia muscular. Se retiró con gestos de preocupación y fue reemplazado por Lovera, encendiendo la alarma en el cuerpo técnico de Central.

El Canalla, que parecía tener el partido controlado y con un hombre más por la expulsión de Daniel Barrea en Godoy Cruz, no supo cerrarlo. En el minuto 88, Vicente Poggi aprovechó una pelota suelta en el área y marcó el empate para el equipo mendocino, que rescató un punto valioso en el cierre.

El público despidió a Di María con una ovación y también con la bronca de no haber podido celebrar una victoria. Central mostró momentos de buen juego, pero volvió a evidenciar errores defensivos que deberá corregir de cara a lo que viene.

Ahora, todos los cañones apuntan a la recuperación física de Fideo, en una temporada donde su presencia genera expectativa nacional e internacional.