¡Qué hermoso es ver cómo la pasión por el fútbol puede unir a las personas de una manera tan especial! Sergio Gómez y Favio Orsi son la prueba viviente de que las relaciones construidas en los campos de juego pueden transformarse en lazos de hermandad. Desde su primer encuentro en 2011, cuando se cruzaron en el Ascenso, su conexión fue instantánea y, sin darse cuenta, comenzaron a escribir una historia que este domingo alcanzó un nuevo hito con la victoria de 1-0 ante Huracán en Santiago del Estero, un triunfo que no solo les otorgó el primer título en la historia del club, sino que también consolidó su legado como un cuerpo técnico sorprendente. La historia de estos dos amigos comienza en un momento de cambio y desafío. 

En 2011, Gómez, a punto de dejar su carrera futbolística y Orsi, quien había tenido que abandonar el fútbol por una lesión, se unieron como asistentes de Oscar Santángelo en el club Fénix. Aquí se gestó una relación que iría más allá del ámbito profesional; se convirtió en una verdadera hermandad. Con el apoyo de César Mansilla, quien fue clave en su carrera, la dupla se comprometió a alcanzar el sueño de llegar a Primera, y lo hicieron en un abrir y cerrar de ojos. 

En su primera temporada como entrenadores, lograron el ascenso a la Primera B Metropolitana, un verdadero logro que marcó el inicio de una trayectoria llena de éxitos. En Deportivo Español y Flandria, enfrentaron adversidades, como inundaciones que los llevaron a entrenar en un colegio, pero su determinación y unión les permitió superar cualquier obstáculo. En Flandria, lograron un ascenso a la Primera Nacional, mostrando que el trabajo en equipo y la confianza mutua son esenciales para alcanzar grandes metas. 

A lo largo de su carrera, han demostrado que su relación va más allá de lo profesional; se han convertido en una familia. Gómez ha elogiado en numerosas ocasiones a Orsi, reconociendo cuánto ha aprendido de él. Aunque suelen dividirse las tareas, su comunicación y trabajo en equipo son la clave de su éxito. Tras un efímero paso por Almagro, llegaron a San Martín de Tucumán, donde, aunque la pandemia detuvo su avance, dejaron una huella imborrable. 

En Ferro, estuvieron a un paso de regresar a Primera, pero su deseo de triunfar los llevó a Godoy Cruz en 2022. Allí, lograron un impresionante 45% de los puntos, sacando al equipo de la zona baja y enfrentando a gigantes como Marcelo Gallardo y Boca, a quienes también lograron vencer. Después llegó el paso por Atlético Tucumán donde tuvieron momentos agridulces.

Finalmente, tras un camino lleno de altibajos, la dupla Gómez-Orsi se consagró en la historia del club Calamar, alcanzando la final de la Copa de la Liga. Y, como si fuera poco, lograron la victoria en un partido decisivo contra Huracán, gracias al gol de Guido Mainero, un momento que quedará grabado en la memoria de todos los hinchas. La historia de Gómez y Orsi es un recordatorio de que con trabajo duro, pasión y, sobre todo, apoyo incondicional, los sueños pueden hacerse realidad. 

Han demostrado que, aunque el camino no siempre es fácil, la amistad y la perseverancia son la clave para superar cualquier desafío. ¡Que sigan los éxitos para esta maravillosa dupla que ha sabido soñar y hacer realidad sus anhelos en el fútbol argentino!