Apronor alerta sobre el quebranto de productores debido a un sistema perjudicial
Apronor describió el sistema como perjudicial, argumentando que conduce al deterioro y a la desaparición de productores.
El denominado "operativo clamor" continúa sumando adhesiones en su intento por persuadir al gobierno nacional de que desista de incrementar las retenciones a partir del 30 de junio. En esa fecha, según lo establecido por el decreto 38/2025, la soja volverá a tributar el 33% y el maíz el 12%. En esta ocasión, la Asociación Civil de Productores Agrícolas y Ganaderos del Norte (Apronor) manifestó su apoyo a esta iniciativa mediante una solicitada publicada en el diario La Nación, donde expuso la situación que consideran insostenible.
Apronor, que agrupa principalmente a productores de Tucumán, destacó que la zona norte del país enfrenta una marcada desventaja en comparación con otras regiones, debido a rendimientos agrícolas más bajos y elevados costos de flete en cultivos esenciales como la soja y el maíz. Según la asociación, el actual sistema tributario representa un "sistema malévolo de cobro de impuestos a los que producen bienes de exportación", lo que estaría provocando la quiebra y desaparición de productores agropecuarios, así como el éxodo de las poblaciones rurales del NOA y NEA.
Es importante recordar que el aumento en las alícuotas, que regresan a los niveles previos al 25 de enero, implicará una recaudación adicional de aproximadamente 1.000 millones de dólares. Estos fondos contribuirán a un Estado que, en conjunto, recaerá sobre el sector agropecuario más de 8.000 millones de dólares durante el año en curso.
En este contexto, Apronor hizo hincapié en que, durante más de dos décadas, se ha producido una significativa transferencia de recursos desde las provincias más postergadas hacia las provincias más prósperas a través del Estado nacional. Los productores señalan que, en contraprestación, reciben una red vial en estado de emergencia y niveles preocupantes de inseguridad, entre otros problemas acuciantes.
Este escenario refleja las tensiones existentes entre el sector agropecuario y el gobierno nacional respecto a la política tributaria y su impacto en las diferentes regiones del país.