Aumento del dólar oficial: la mayor variación en tres semanas
El dólar contado con liquidación se aproxima a $1.500 mientras la brecha cambiaria permanece en niveles de dos dígitos, reflejando tensiones entre mercados y políticas cambiarias.
El mercado cambiario mostró movimientos significativos el lunes 29 de septiembre, con el dólar oficial registrando un avance pese a una fuerte liquidación y con volúmenes mayoristas entre los más elevados del mes. Las medidas del Gobierno para frenar maniobras de arbitraje entre mercados —reimpulsando restricciones cruzadas— provocaron ajustes en los precios de los distintos tipos de cambio y una marcada actividad compradora de divisas por parte del Tesoro.
En el segmento spot, el dólar cerró en $1.351/$1.360, lo que implicó un aumento de $34 respecto del cierre del viernes anterior. El volumen operado en el segmento mayorista alcanzó u$s869.712 (segundo mayor del mes) y en el mercado de futuros se registraron operaciones por u$s1.976 millones.
En bancos, el Banco Nación cotizó el billete para la venta en $1.380. En el mercado informal, el dólar blue se ubicó en $1.430, reduciendo la brecha al 5,2% respecto del oficial. Los segmentos financieros mostraron valores superiores: el MEP operó en $1.451,14 y el Contado con Liquidación (CCL) rozó los $1.500, cerrando en $1.490,20, con una brecha en torno al 9,5% desde el viernes pasado —es decir, la distancia entre tipos de cambio se mantuvo en dos dígitos en términos acumulados.
El mercado de futuros también evidenció renovado dinamismo, con subas generalizadas. El contrato para octubre operó con una TNA cercana al 70%, avanzando 1,8% y situándose en $1.431. En plazos más largos, los contratos para fin de año aumentaron 2,7%, alcanzando los $1.559.
En síntesis, la jornada reflejó un reacomodamiento de precios ante medidas regulatorias y operaciones del Tesoro: el dólar oficial subió con volúmenes elevados, los tipos financieros se mantuvieron por encima del billete mayorista y los futuros acusaron un incremento en las tasas implícitas, evidenciando expectativas de mayor presión cambiaria hacia el cierre del año.