Caputo negocia con Bessent, mientras el FMI y Macri alinean el acuerdo que refuerza la alianza Milei–Trump
El ministro de Economía ya mantuvo una primera ronda de conversaciones con el secretario del Tesoro de EE. UU., en una negociación que combina respaldo financiero, influencia política de Macri y el aval técnico del FMI en coordinación con la Casa Blanca.
El ministro de Economía, Luis Caputo, y el secretario del Tesoro de EE. UU., Scott Bessent, ya iniciaron conversaciones clave para concretar un paquete de asistencia financiera que permita al gobierno argentino estabilizar los mercados y fortalecer las reservas del Banco Central.
“Me complace dar la bienvenida a Luis Caputo y a la delegación argentina al Tesoro de los Estados Unidos. Durante su estadía en Washington, continuaremos nuestras productivas conversaciones sobre las diversas opciones que el Tesoro tiene preparadas para apoyar las sólidas políticas de Argentina”, expresó Bessent a través de su cuenta oficial en X.
Cuatro herramientas en evaluación para apoyar a la Argentina
Bessent puso sobre la mesa un abanico de instrumentos para asistir al gobierno de Javier Milei:
- Compra de bonos argentinos en dólares
- Línea de crédito stand-by
- Adquisición de deuda pública (primaria o secundaria)
- Swap por 20.000 millones de dólares
El punto aún sin definir es el origen concreto de los fondos que se utilizarán para respaldar el programa económico de Caputo.
Una opción es el Fondo de Estabilización Cambiaria, bajo control del Tesoro, que actualmente dispone de unos 24.000 millones de dólares. Sin embargo, la crisis fiscal interna de Estados Unidos y la puja entre demócratas y republicanos por el presupuesto federal 2026 paralizó buena parte de la gestión administrativa y dificulta liberar esos recursos.
En este contexto, para la administración republicana sería políticamente costoso utilizar fondos públicos de ese fondo para asistir a un país con un historial de inestabilidad financiera como Argentina. En otras palabras: si Donald Trump no está dispuesto a asumir el costo de recortar beneficios sociales internos, como el gasto en salud para jubilados, mucho menos puede aparecer entregando miles de millones de dólares al exterior.
DEG: la alternativa "invisible" que evalúa la Casa Blanca
Ante este escenario, los cuatro instrumentos planteados por Bessent siguen en pie, pero no con dinero líquido del Tesoro. El gobierno de Trump apunta ahora a utilizar Derechos Especiales de Giro (DEG), la moneda del Fondo Monetario Internacional.
El Fondo de Estabilización Cambiaria cuenta con 173.600 millones de DEG, y Estados Unidos puede activarlos con una simple notificación formal a la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva. Aunque Washington nunca utilizó estos fondos en el pasado —y Trump incluso los repudió durante su primer mandato—, esta vez estaría dispuesto a usarlos para sostener el experimento libertario de Milei.
Desde la Casa Blanca consideran que sería más fácil justificar ante la opinión pública el uso de DEG que explicar un desembolso directo en dólares del Tesoro.
“Tuve una excelente conversación con @LuisCaputoAR sobre las perspectivas de Argentina y sus iniciativas de reforma. Trabajamos en estrecha colaboración con @USTreasury y otros socios para promover la estabilidad macroeconómica y el crecimiento”, publicó Georgieva en su cuenta de X tras recibir a Caputo.
FMI, informes técnicos y coordinación con el Congreso de EE. UU.
La relación entre Caputo y Georgieva es fluida, y el staff técnico del FMI ya comenzó a trabajar para facilitar el respaldo financiero que EE. UU. quiere brindar a Argentina. Si el paquete del Tesoro se extiende por más de seis meses, Bessent deberá notificar los términos al Capitolio.
Por eso, el secretario del Tesoro habría solicitado al FMI un informe técnico que respalde el acuerdo, documento que será utilizado por la Casa Blanca ante el Congreso estadounidense.
Pese a algunas objeciones técnicas dentro del Fondo, Georgieva está alineada con el Tesoro para sostener el plan de ajuste de Milei.
Las condiciones políticas de EE. UU.: frenar al kirchnerismo y cortar con China
A cambio del apoyo financiero, la administración Trump ya habría transmitido dos condiciones políticas al Gobierno argentino:
- Alcanzar un acuerdo político que limite el avance del kirchnerismo.
- Enfriar las relaciones económicas y financieras con China.
Ambos temas fueron tratados directamente entre Milei y Mauricio Macri, quien asumió un rol de interlocutor clave en esta etapa.
Macri, Trump y los gestos entre bastidores
Antes de regresar a la residencia de Olivos, Macri se reunió con Donald Trump en Nueva York, durante un evento deportivo. En ese encuentro se discutió el rumbo de Argentina y la situación regional. El ex presidente también mantuvo contacto con influyentes funcionarios republicanos que le ratificaron el respaldo a Milei.
Sin embargo, también dejaron claro un mensaje: el apoyo de la Casa Blanca no es incondicional. Milei necesita construir alianzas que garanticen gobernabilidad si quiere evitar un revés electoral en 2027.
Así, el asesoramiento político de Macri y el apoyo técnico del FMI se combinan para reforzar la negociación de Caputo, que mantiene contacto directo con el presidente. De hecho, Milei siguió desde el Movistar Arena la presentación pública del ministro en el marco de su visita a EE. UU.