El dólar oficial mayorista sufrió una fuerte caída de 70 pesos y se alejó del techo de la banda cambiaria tras una serie de señales de respaldo internacional y medidas económicas internas. La combinación de un aval explícito del Tesoro de Estados Unidos y la confirmación del regreso de retenciones cero para granos y carnes hasta el 31 de octubre generó un movimiento pronunciado en los distintos segmentos del mercado cambiario.

El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, afirmó en su cuenta en X que “Argentina es un aliado sistémicamente importante de EE. UU. en América Latina” y que el Tesoro está dispuesto a “hacer lo que sea necesario dentro de su mandato para apoyar a Argentina”. Bessent agregó que “todas las opciones de estabilización están sobre la mesa”, mencionando instrumentos como líneas de swap, compras directas de divisas o la adquisición de deuda pública denominada en dólares del Fondo de Estabilización Cambiaria del Tesoro.

En ese marco, el dólar mayorista, referencia para la liquidación de exportaciones agropecuarias, operó con retrocesos durante la jornada: tras abrir en $1.475 llegó a negociarse cerca de $1.420 y cerró en torno a $1.405. Este comportamiento refleja la percepción de menor presión cambiaria ante la expectativa de apoyo externo y la política de retenciones temporaria.

En el segmento minorista, el promedio bancario publicado por el Banco Central muestra cotizaciones de $1.408,18 para la compra y $1.467,80 para la venta. En el Banco Nación, la compra se ubica en $1.390 y la venta en $1.440. Por su parte, el dólar “tarjeta” o turista —que aplica un recargo del 30% y se computa para ciertos impuestos— se situó en $1.872.

Los mercados paralelos también registraron bajas: el dólar blue cayó 45 pesos, vendiéndose a $1.475 según un relevamiento en las cuevas de la city. El dólar MEP retrocedió 5,8% hasta $1.461,22, dejando una brecha del 3,6% respecto del mayorista; mientras que el contado con liquidación (CCL) bajó 6,2% a $1.470,37, con un spread de 4,4% frente a la cotización oficial.

En los contratos de futuros predominó la tendencia a la baja. El mercado descuenta un tipo de cambio mayorista cercano a $1.394 para fines de septiembre y proyecta que en diciembre podría ubicarse en torno a $1.526, cifra que supera el techo de la banda cambiaria vigente. Estas valuaciones muestran que, pese a la caída reciente, persisten expectativas de depreciación hacia fin de año.

En resumen, la combinación de un respaldo internacional explícito y ajustes en la política de retenciones produjo una caída significativa del dólar oficial y de los paralelos en la jornada, aunque las proyecciones a futuro mantienen cierta incertidumbre sobre la evolución del tipo de cambio hacia el cierre del año.