La propuesta de dolarizar la economía es una de las más taquilleras del candidato a la Presidencia, Javier Milei. Sin embargo, los especialistas sostienen que no se trata de una propuesta mágica y, aún quienes acuerdan con la idea, advierten que falta información para saber cómo se hará o anticipar algunas consecuencias reales.

Los cambios de gobierno ponen en alerta a la mayoría de los argentinos debido a los cambios que suelen producirse en la economía elecciones mediante. Incluso antes de que se produzca el cambio de mando, tal como ya pasó en las PASO de 2019 y las recientes de agosto. Con el anuncio de la dolarización, quienes tienen pagan créditos tomados se preguntan qué puede suceder con esa deuda.

Luego de la mala experiencia que tuvieron quienes tomaron créditos UVA, tanto personas como empresas que adeudan un crédito hipotecario, bancario o de cualquier tipo se preguntan qué puede suceder con su acreencia a partir de diciembre. Los créditos UVA se otorgaron a partir de 2016 para compra de viviendas y de autos.

Al dispararse la inflación no solo la cuota se hizo difícil de pagar, sino que se comenzó a estirar de manera indefinida la cantidad de años que hay que pagar para poder cancelar el crédito. Aunque en julio la Cámara de Diputados realizó modificaciones a esta norma, el Senado todavía no la trata por lo que incertidumbre sobre esto continúa.

Dólar a 730 pesos

En líneas generales, las visiones son diferentes, pero tanto quienes están en contra de la dolarización de Milei como de los que avalarían la medida, creen que hay fallas técnicas y que las cuotas de los préstamos tomados podrían tener complicaciones, al menos en el corto plazo.

Dolarización: qué puede pasar con los créditos UVA

El candidato libertario aclaró que, de hacerse la dolarización, sería al actual valor del MEP que está en $730. En este contexto, el economista José Vargas de la consultora Evaluecon destacó que cualquiera sea la deuda a saldar, debe realizarse a dicho tipo de cambio. Desde su punto de vista, esto puede provocar un quiebre del sistema financiero.

“La dolarización no sería una buena medida para quienes tienen deuda y, mucho menos, para los que han tomado un crédito UVA que ajustan por variable inflación, algo en lo que también incide la devaluación”, expresó Vargas. Desde su punto de vista, a menos que haya alguna normativa que regule esto especialmente, quienes haya tomado deuda en dólares, pesos o por crédito UVA estarán en una situación muy compleja.

Por otra parte, el economista Daniel Garro, de International Value Group, expresó que a su juicio quienes tienen deudas no sufrirán grandes cambios. “Si deben 730 pesos, pasarán a adeudar un dólar”, destacó. Garro se ha manifestado siempre a favor de la competencia de monedas y de la posibilidad de elegir la que a uno le convenga y de la eliminación del Banco Central de la República Argentina (BCRA). En este punto, agregó que así como los créditos pasarán a dólares, también lo hará el salario.

No obstante, este economista concedió que no está claro qué pasaría con los préstamos en pesos si el crédito UVA se transforma en dólares. Aunque desde su mirada no tendría por qué haber complicaciones, expresó que no se ha abordado este tema de manera específica.

Gustavo Reyes es economista del Ieral de Fundación Mediterránea, organismo que preside Carlos Melconian, propuesto como ministro de Economía por la candidata Patricia Bullrich. Desde su mirada es imposible realizar una dolarización en los términos de Milei por lo que no tiene sentido pensar en qué pasaría con las deudas.

Sin embargo, en un posible contexto dolarizado, expresó que habrá licuación de precios y salarios por lo que cualquier deuda en términos reales crecería. Esto por no mencionar el peligro que implicaría para el sistema financiero que el BCRA no pueda financiarse a través de pesos, más allá de la generación de inflación que esto implica.

Dificultades para los deudores

En líneas generales Garro está a favor de la idea de dolarizar, pero aclaró que se trata de algo que plantea desde los 90 y que nada tiene que ver con el candidato Milei. De hecho, con relación a su propuesta, este economista señala “fallas técnicas” y de “aplicabilidad” al tiempo que admitió que en la primera etapa de la dolarización no se ve una solución al sistema de encajes.

“Es muy probable que tengamos algo de inflación en dólares al principio, hasta que los precios relativos se acomoden, se elimine el déficit y baje el gasto público”, expresó Garro. En esta línea, la posibilidad de que haya tasas altas de interés en dólares está presente en la primera etapa de una economía dolarizada. Es que los cambios no pueden hacerse de un día para otro y, sobre todo, el éxito dependerá de la confianza en el futuro que tenga el mercado, algo para lo que habrá que esperar.

Para el economista, en términos de créditos o depósitos la traducción va a ser de $730 a un dólar y no habría mayores inconvenientes. “El tema es cómo se ajusta lo demás y eso va a depender del resto de las medidas que se tomen para que el proceso de inflación en dólares y de tasas altas en dólares sea lo más corto posible hasta que los precios relativos se ajusten a los precios internacionales”, destacó el responsable de Value International Group.