El consumo cayó un 40% en los bares tucumanos y hay preocupación
Desde la Cámara de Gastronómicos advirtieron que hay puestos de trabajo en riesgo.
La situación económica no da descanso en el país y para muchos tucumanos, salir a comer o tomar algo en un bar resulta siendo un lujo. Los precios de los almuerzos, cenas o un simple desayuno se han elevado bastante y los gastronómicos están preocupados.
Desde la Cámara que los nuclea en San Miguel de Tucumán advirtieron a Los Primeros que el consumo cayó un 40% y los gastos para mantener un local abierto se han elevado de un modo casi insostenible.
Además, dejaron en claro que no están de acuerdo con que el horario comercial pase a ser de corrido ya que esto podría perjudicarlos aún más en las ventas.
"Una familia de cuatro personas necesita al menos $25.000 para sentarse a comer un sánguche de milanesa", afirmó Constanza Bauque, presidente de la Cámara de Gastronómicos.