En un contexto de creciente interés por parte del Gobierno argentino en mejorar sus relaciones comerciales internacionales, se ha iniciado un análisis sobre la posibilidad de reducir los aranceles aplicados a productos farmacéuticos. Este movimiento se enmarca dentro de las negociaciones que el Ejecutivo, liderado por el ministro de Economía, Luis Caputo, mantiene con los Estados Unidos

El objetivo es cerrar un acuerdo comercial que contemple la reciprocidad arancelaria, lo cual implica una revisión exhaustiva de las políticas actuales relacionadas con el comercio exterior. El equipo del ministro Caputo se encuentra en la fase de estudio de diversas opciones técnicas que puedan facilitar la implementación de esta política. En el seno del oficialismo, se reconoce que, aunque existe la intención de avanzar en esta dirección, el proceso no será inmediato. "Lo vamos a hacer, pero no va a ser en el corto plazo. Estamos afuera del mundo en términos de propiedad intelectual. No va a ser fácil volver", se expresa en los círculos gubernamentales, subrayando la complejidad del camino que se debe transitar. 

En este sentido, la Casa Rosada ha indicado que parte de las iniciativas destinadas a fortalecer la protección de las patentes se promoverán a través de un proyecto de ley, lo que refleja un compromiso por parte del Gobierno para alinearse con las normativas internacionales. La Nación tiene la facultad de oficializar la reducción de derechos de importación mediante un decreto, lo que podría facilitar la adopción de cambios necesarios en este ámbito. 

La intención del Gobierno es que Argentina se adapte a la legislación internacional, específicamente a los términos que rigen el Tratado de Cooperación en materia de Patentes (PTC) de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (WIPO, por sus siglas en inglés). Esta adecuación no solo busca mejorar el entorno de inversión y protección a la propiedad intelectual en el país, sino también elevar la competitividad de la industria nacional en un mercado global cada vez más exigente. 

Cabe mencionar que, según el análisis realizado por la Cámara de Comercio de los Estados Unidos, Argentina se posiciona en el puesto 45 de los 55 países evaluados en la edición 13 del IP Index. Este ranking pone de manifiesto los desafíos que enfrenta el país en términos de protección de la propiedad intelectual y resalta la necesidad de implementar reformas significativas en este ámbito.