El mercado cambiario argentino vivió una jornada marcada por la influencia de la liquidación agroexportadora y las decisiones oficiales sobre el régimen de retenciones. Tras el anuncio de que el cupo de u$s 7.000 dispuesto para exenciones se había agotado en apenas tres días, el Gobierno confirmó que la exención de retenciones se mantendrá únicamente para las exportaciones de carnes avícolas y bovinas hasta el 31 de octubre, conforme al decreto 682. La comunicación, difundida por el vocero presidencial Manuel Adorni, buscó atemperar la incertidumbre generada entre los productores tras la confirmación de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) sobre el alcance del tope y la consecuente suspensión del registro de nuevas Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE) bajo ese beneficio.

En este marco, el dólar mayorista mostró una corrección a la baja y operó alrededor de $1.335, una caída cercana al 0,5% respecto de la jornada previa. Analistas del mercado señalaron que en las próximas tres ruedas se esperan elevados volúmenes originados en las ventas de divisas por parte del sector agropecuario, lo que ejercerá presión bajista sobre la cotización. No obstante, advirtieron que esa dinámica podría verse parcialmente contrarrestada por la demanda de dólares que provoque el Tesoro, lo que mitigaría la caída y establecería un piso para el tipo de cambio.

En el segmento minorista, el promedio que publica el Banco Central ubicó al dólar oficial en $1.298,22 para la compra y $1.353,52 para la venta. En el Banco Nación, el billete se ofreció a $1.295 y $1.345, respectivamente. Entre los segmentos financieros, el dólar MEP cotizó en torno de $1.364,14, mientras que el Contado con Liquidación (CCL) fue el único que registró un rebote, operando cerca de $1.394,52.

La plaza de futuros también reflejó nerviosismo: según informó el economista Gabriel Caamaño, al mediodía se registraban más de un millón de contratos en ROFEX (equivalentes a u$s 1.000 millones) y la tasa implícita del contrato octubre se ubicaba en torno al 60% TNA. Los contratos a término mostraron subas significativas; el de diciembre trepó 3,7% hasta los $1.543, y el de febrero de 2026 se elevó hasta $1.615. En conjunto, los vencimientos se mostraron presionados al alza, incorporando tanto las expectativas sobre el comportamiento del tipo de cambio como los efectos de la mayor liquidez proveniente de las exportaciones agropecuarias.

En síntesis, la jornada combinó una fuerte entrada de dólares por la liquidación del agro con señales del mercado de futuros que reflejan expectativas de depreciación futura. La intervención oficial y las necesidades de financiamiento del Tesoro serán variables determinantes para la evolución del tipo de cambio en las próximas ruedas.