Se espera un nuevo aumento en el precio del combustible para esta semana
Mientras los precios ya superan los valores de países vecinos, YPF se prepara para aplicar una subida en los combustibles. Argentina se ubica entre los países con la nafta más cara de la región.
Se anticipa un nuevo aumento en los precios de los combustibles para los primeros días de julio. La petrolera YPF, que había mantenido sus precios en un momento en que otras compañías ajustaron los suyos, se prepara para liderar esta nueva suba. Este ajuste se produce en un marco donde el costo de la nafta y el gasoil en Argentina ha superado al de otros países de la región, a pesar de que Argentina es un productor de hidrocarburos.
De acuerdo con el último informe de Global Petrol Prices, el litro de nafta en Argentina tiene un costo promedio de 1,15 dólares, mientras que el gasoil se encuentra en 1,19 dólares. Estos precios presentan variaciones en función de la región, siendo la Ciudad de Buenos Aires una de las localidades con precios relativamente más bajos, gracias a ciertos beneficios logísticos y a la ausencia de tasas municipales que encarecen el producto.
La comparación con otros países sudamericanos pone de manifiesto una significativa diferencia en los precios. Por ejemplo, en Paraguay, que no cuenta con producción de petróleo, el litro de nafta se vende a 0,80 dólares y el gasoil a 0,87 dólares. Brasil, un importante productor regional, ofrece la nafta a 1,13 dólares y el gasoil a 1,08 dólares. Mientras tanto, Chile, que depende de las importaciones, tiene precios de 1,35 dólares para la gasolina y 1,00 dólar para el diésel. En Uruguay, tradicionalmente más caro, la nafta se comercializa a 1,95 dólares y el gasoil a 1,16 dólares.
Este incremento en los precios de los combustibles en Argentina está, en gran medida, vinculado a la situación cambiaria. Tras la devaluación implementada en diciembre de 2023 por el presidente Javier Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo, se ha observado un desfase entre el dólar oficial y la inflación. Esto ha llevado a un encarecimiento en dólares de diversos bienes y servicios, incluyendo los combustibles.
Se espera un nuevo aumento para los primeros días de julio
Alberto Fiandesio, exsubsecretario de Combustibles, ha señalado que el hecho de que los combustibles argentinos sean los más caros de la región está relacionado con el tipo de cambio. Además, la estructura impositiva actual se remonta a épocas en las que los precios eran más competitivos en comparación con países vecinos. En este sentido, un ejecutivo del sector petrolero explicó que alrededor del 35% del precio del combustible en Argentina corresponde a impuestos nacionales y provinciales, sin contar las tasas municipales que pueden variar entre un 2% y un 4%.
A diferencia de Argentina, en otros países los impuestos sobre los combustibles tienden a ser más flexibles y se ajustan para mitigar las variaciones en los precios internacionales del crudo. Durante las últimas semanas, las empresas Shell, Axion y Puma han implementado aumentos de hasta un 10%, mientras que YPF optó por mantener sus precios en un intento de no perder competitividad en el mercado. Sin embargo, esta decisión ha resultado en una diferencia de entre el 8,2% y el 10,7% respecto a sus competidores.
Fuentes del sector indican que aún existe un 5% de retraso en los precios de los combustibles en Argentina, lo que alimenta las expectativas de que YPF pueda liderar un nuevo aumento a partir del 1 de julio. Este contexto presenta un escenario complejo para los consumidores, quienes deberán afrontar un nuevo ajuste en un mercado ya de por sí complicado.