Una importante fábrica argentina sintió el freno de la construcción: cayó un 40% en ventas y suspendió a 800 trabajadores
Con más de 100 años de trayectoria, la emblemática empresa de griferías atraviesa una difícil situación que se intensificó con la caída del sector de la construcción y la competencia de productos importados de baja calidad y precio.
Ferrum presentó su balance consolidado al 31 de marzo, correspondiente a los primeros nueve meses de su ejercicio económico, con datos que reflejan una significativa contracción en el nivel de actividad. Los ingresos por ventas sumaron $73.449,4 millones, lo que representa una caída del 40,2% interanual frente a los $122.873,6 millones registrados al mismo corte de 2024.
El principal motivo de la baja fue el menor volumen despachado en el mercado local de artefactos sanitarios, bañeras y muebles, según explicó la empresa. En efecto, las ventas acumuladas de artefactos y accesorios sanitarios pasaron de 1,47 millones de unidades a 941.851, lo que implica una retracción del 36%. La producción cayó todavía más: de 1,2 millones de unidades a 619.024, una baja del 48,5%.
Menores márgenes y resultado acotado
La ganancia bruta se redujo a $28.617,4 millones, desde los $54.158 millones del período previo. En términos de margen, se achicó del 44,1% al 39%, producto de la menor escala productiva y mayor peso de los costos fijos. Sin embargo, Ferrum destacó que esto fue “mitigado por los resultados de los proyectos de productividad en los procesos productivos y menores gastos de fabricación”.
Por su parte, los gastos de administración y comercialización fueron de $21.571,5 millones, un 33,8% menos que en 2024, impulsado por recortes en fletes, impuestos e inversión en publicidad.
Un dato clave fue el salto de los otros egresos operativos netos, que pasaron de $864 millones a $6.698 millones. La diferencia se debió principalmente a “la parada de la producción mensual de artefactos sanitarios en la planta de Villa Rosa en julio, la restructuración del personal y el incremento de la previsión para deudores incobrables”
La fábrica de más de cien años que hoy está en crisis
Ferrum es una emblemática empresa argentina con una historia centenaria que comenzó el 4 de septiembre de 1911, cuando fue autorizada como Industria Argentina de Metales S.A. mediante un decreto del gobierno nacional. Sin embargo, sus días de grandeza comenzaron a quedar en un recuerdo, ya que actualmente padece una profunda crisis financiera.
Desde sus inicios, Ferrum se dedicó a la fabricación de artefactos sanitarios y griferías, adaptándose a los cambios sociales, económicos y tecnológicos a lo largo de más de un siglo, siempre con un fuerte compromiso con la innovación y la calidad para satisfacer las necesidades de higiene y confort en baños, cocinas y lavaderos.
El Grupo FV, al que pertenece Ferrum, tiene raíces que se remontan a 1899 en Alemania, cuando Franz Viegener fundó una empresa en Attendorn dedicada a la fabricación de griferías para la industria cervecera, forjadas en bronce. En 1921, su hijo fundó FV S.A. en Buenos Aires, marcando el inicio de una empresa familiar que se expandió rápidamente en Argentina y Latinoamérica, con un fuerte enfoque en la calidad, el diseño y la sustentabilidad.
A lo largo de su trayectoria, FV y Ferrum han innovado continuamente, destacándose hitos como la creación de la primera grifería monocomando en 1970, la incorporación de nuevos acabados y materiales, y la apertura de plantas y oficinas en distintas provincias argentinas y en el extranjero.
En 1984, FV adquirió Ferrum, consolidando así un grupo líder en el mercado de productos sanitarios y griferías en Argentina y Latinoamérica, con presencia en 25 países y un portafolio de más de 3.500 productos.
Ferrum se destaca como la mayor fábrica de artefactos sanitarios de cerámica del país, con más del 50% del mercado local y una importante capacidad exportadora. La empresa ha sabido combinar tradición con modernidad, incorporando criterios de sustentabilidad y eficiencia en sus procesos y productos para responder a las demandas actuales del mercado y del cuidado ambiental.
Preocupación entre los trabajadores
Rodolfo Viegener, dueño de la fábrica de griferías Ferrum, perteneciente al Grupo FV, habló con franqueza sobre la delicada situación que atraviesan sus plantas de producción. En una entrevista para el podcast "La Fábrica", Viegener describió que la compañía está “en una recesión muy grande” y que actualmente se encuentran “esperando que la cosa resucite un poco”.
Ferrum, que ya superó el siglo de existencia, enfrenta un momento particularmente complejo. En mayo de 2024, la empresa suspendió a 800 operarios de su planta en Pilar, donde trabajan 1.400 personas en total y se fabrican alrededor de 3.500 artículos distintos. Esta medida refleja la caída en la actividad y la necesidad de ajustar costos en un contexto económico adverso.
“Hoy en día se trabaja con presupuesto financiero, se revén los pronósticos de ingresos todas las veces que sea necesario”, indicó Viegener. A pesar de no haber tomado otras medidas drásticas, reiteró que no se observa un repunte en la actividad de la construcción, sector clave para la demanda de sus productos.
Los factores de la crisis de Ferrum
Uno de los factores que el empresario señaló como problemáticos es la importación masiva de productos desde China, que comenzó a impactar desde el año 2000. Según Viegener, el producto chino es muy barato, llegando a costar la mitad que los nacionales, aunque el costo de instalación puede superar al precio del producto mismo.
Además, destacó que estos productos importados carecen de durabilidad y garantía, aunque reconoció que es lógico que los consumidores opten por ellos debido a su bajo precio.
El empresario admitió que tienen dificultades para competir en precio con estos productos importados, ya que no les es posible reducir costos hasta ese nivel sin afectar la viabilidad. Sin embargo, Ferrum apuesta a competir con calidad, enfocándose en la producción de artículos de alta gama que ofrecen mayor durabilidad y respaldo.
La crisis del sector se agrava con la caída del 27,4% en la construcción durante 2024, lo que afecta directamente a empresas vinculadas a la fabricación de materiales para viviendas y obras públicas y privadas, como es el caso de FV.