¿Qué vitaminas y minerales ayudan a superar el COVID-19?
Una dieta de alta calidad, como la mediterránea o similares, reduce mucho el riesgo de infectarse, la mortalidad o el ingreso hospitalario.
La receta para que el cuerpo enfrente cualquier infección no suele cambiar: generar energía a través de los alimentos, mantenerse hidratado y una pizca de proteínas que ayuden a reparar los tejidos y las células. La del COVID-19, sin embargo, es causada por un virus distinto a todos los que conocíamos. Es nuevo, así que nuestros sistemas inmunológicos no estaban preparados para enfrentarlo. Tampoco existían medicamentos para combatirlo. Aun así los expertos en nutrición afirman que la alimentación es crucial para enfrentar la enfermedad.
Son varios los estudios científicos que han corroborado que un patrón de dieta mediterránea adecuado protege a la hora de infectarse de COVID-19, pero también de ingresar en el hospital por haber desarrollado una enfermedad grave, o de incluso de morir. Así lo afirma el investigador del CIBEROBN epidemiólogo y catedrático en Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Navarra, el profesor Miguel Ángel Martínez-González, quien remarca que nuestra alimentación es “muy importante” ante este escenario de pandemia.
Han salido varios estudios científicos con similares resultados, el más importante de ellos el realizado por el español Jordi Merino, que trabaja en Harvard, y que ha constatado que una dieta de alta calidad, como la mediterránea o similares, reduce mucho no solo el riesgo de infectarse del SARS-CoV-2, sino también el riesgo de mortalidad por COVID o el ingreso hospitalario por esta enfermedad. “Ahora más recientemente se ha visto que no es un alimento singular, porque se han ido analizando todos los componentes de la dieta mediterránea, y quizá se ha visto que el exceso de lácteos enteros aumenta más el riesgo, pero es más importante la acción conjunta de todos ellos que achacarlo a cualquiera aisladamente”, subraya el catedrático de la Universidad de Navarra.
Alimentos
Los nutrientes, los alimentos y las prácticas nutricionales clave que pueden ser beneficiosos para las personas que tienen COVID-19 o se están recuperando.
1. Vitamina D
La vitamina D es el micronutriente más discutido entre los expertos en nutrición para el manejo de COVID-19. Esta vitamina y hormona liposoluble ejerce un efecto antiinflamatorio al suprimir la hiperactividad del sistema inmunitario. Además puede desempeñar un papel protector y apoyar la curación de los tejidos dañados, principalmente en los pulmones.
7 alimentos ricos en vitamina D, junto con la cantidad de vitamina que contiene cada uno:
- Aceite de hígado de bacalao: 170% del valor diario (VD) por 1 cucharada (13,6 gramos)
- Arenque: 27% del DV por 100 gramos
- Yema de huevo: 27% del DV por 100 gramos
- Sardina: 24% del DV por 100 gramos
- Atún claro enlatado: 34% del DV por 100 gramos
- Salmón, capturado en la naturaleza o de piscifactoría: 66% del DV por 100 gramos
- Jugo de naranja fortificado: 25% del DV por 100 gramos
Los hongos silvestres son una fuente vegetariana de vitamina D.
2. Carotenoides y vitamina A
La vitamina A es un carotenoide antioxidante liposoluble. Tiene propiedades antiinflamatorias y las investigaciones han demostrado que puede ser beneficioso para controlar la neumonía y las infecciones respiratorias.
En el caso de COVID-19, los estudios indican que la vitamina A reduce la inflamación y el estrés oxidativo, mejora la respuesta inmune y puede disminuir la gravedad de la enfermedad.
8 alimentos ricos en vitamina A, junto con el porcentaje de DV por 100 gramos de cada uno:
- Hígado de res: 552% del DV
- Hígado de pollo: 327% del DV
- Caballa gigante: 24% del DV
- Queso de cabra: 54% del VD
- Camote, cocido: 87% del DV
- Col rizada: 28% del DV
- Zanahorias, crudas: 93% del DV
- Espinacas tiernas, crudas: 31% del DV
3. Zinc
La deficiencia de zinc se ha asociado con un mayor riesgo de infecciones y peores resultados en las personas con COVID-19. Sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias pueden reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, ayudar a la salud ocular y son esenciales para la salud inmunológica.
Siete alimentos ricos en zinc, junto con el % de DV por 100 gramos de cada uno:
- Carne molida: 41% del DV
- Chocolate amargo (70–85% cacao): 30% del VD
- Ostra de mariscos, enlatada: 73% del DV
- Anacardos: 53% del DV
- Semillas de cáñamo: 90% del DV
- Semillas de calabaza: 71% del DV
- Lentejas, germinadas, crudas: 14% del DV
4. Ácidos grasos omega-3
Estas grasas omega-3, específicamente el ácido eicosapentaenoico (EPA) y el ácido docosahexaenoico (DHA), pueden mejorar la recuperación en personas con COVID-19.
Las grasas omega-3 reducen la inflamación y el potencial de la “tormenta de citoquinas” en el COVID-19. Otro beneficio potencial de las grasas omega-3 en el tratamiento de personas con COVID-19 o que se están recuperando de él es su función para mejorar el estado de ánimo, la ansiedad y la depresión.
Ocho alimentos ricos en ácidos grasos omega-3, junto con la cantidad de omega-3 que se encuentra en cada uno:
- Semillas de chía: 6 gramos por 100 gramos
- Soja, tostada en seco: 1,4 gramos por 100 gramos
- Sardinas, enlatadas: 498 mg por 100 gramos
- Aceite de hígado de bacalao: 935 mg por cucharada
- Caballa: 159 mg por 100 gramos
- Linaza: 23 gramos por 100 gramos
- Nueces: 9 gramos por 100 gramos
- Salmón: 113 mg por 100 gramos
Muchos alimentos ricos en grasas omega-3 también son fuentes ricas en vitamina D.
5. Vitamina C
La investigación emergente demuestra que dar vitamina C a las personas con COVID-19 puede ayudar a la recuperación y la mejora durante el curso de la enfermedad.
La evidencia preliminar sugiere que tomar vitamina C puede ayudar a las personas con COVID-19, pero se necesitan más estudios en humanos.
Ocho alimentos naturalmente ricos en vitamina C, junto con el % de DV por cada 100 gramos de cada uno:
- Guayaba, cruda: 253% del DV
- Acerola (cereza de las Indias Occidentales): 1,867% del DV
- Kiwi, crudo: 103% del DV
- Coliflor, cruda: 54% del DV
- Tomates enlatados: 14% del DV
- Patata, con piel: 13% del DV
- Pimiento dulce, rojo: 142% del DV
- Papaya, cruda: 68% del DV
Fuente: Infobae