El lunes por la tarde, un ataque aéreo israelí impactó el edificio principal de la Radio y Televisión de la República Islámica de Irán (IRIB), ubicado en el tercer distrito de Teherán, lo que resultó en la interrupción de una transmisión en vivo. En ese momento, la periodista Sahar Emami, quien se encontraba presentando un segmento crítico hacia el Estado de Israel, fue sorprendida por el bombardeo, lo que provocó que se alejara rápidamente de la cámara justo antes de que la transmisión se cortara abruptamente, mientras algunos escombros caían en el área visible. Este incidente evidencia la tensión en la región y cómo los conflictos se trasladan a diversos medios de comunicación.