Conmoción en el ajedrez mundial por la muerte del gran maestro Daniel Naroditsky, a los 29 años
Falleció de manera inesperada, anunció su familia a través del Charlotte Chess Center. Su carrera como jugador, comentarista y educador generó reconocimiento global en el ámbito del ajedrez.
El gran maestro estadounidense Daniel Naroditsky murió el lunes a los 29 años, según informó su familia a través del Centro de Ajedrez de Charlotte (Charlotte Chess Center).
La causa de su fallecimiento no fue revelada, y la familia pidió respeto a su privacidad en estos momentos.
Naroditsky, nacido en San Mateo, California, en 1995, había logrado el título de gran maestro en 2013, cuando tenía 18 años.
Desde muy joven, el ajedrecista mostró gran promesa y terminó haciéndose un nombre tanto por su juego como por su rol como divulgador del ajedrez. El comunicado de su familia lo definió como “un talentoso jugador de ajedrez, educador y miembro querido de la comunidad ajedrecística”.

Trayectoria
Del prodigio al gran maestro
Naroditsky descubrió el ajedrez tempranamente: según las fuentes, comenzó a jugar a los seis años y ganó el Campeonato Mundial Juvenil Sub-12 en 2007.
Ese mismo año se posicionó como uno de los jóvenes talentos más prometedores de Estados Unidos. En 2013 obtuvo oficialmente el título de gran maestro, lo que marcó el inicio de una carrera de alto nivel.
En su trayectoria competitiva, Naroditsky alcanzó un rating Elo máximo de 2.647 en mayo de 2017.
Además de su desempeño en ajedrez clásico, destacó en modalidades de ritmo rápido (blitz), donde se ubicó entre los 25 mejores del mundo.
Su formación también incluyó estudios en la Universidad de Stanford, donde se graduó en Historia en 2019.
Posteriormente se instaló en Charlotte, Carolina del Norte, donde entrenó y dio clases de ajedrez, además de participar como comentarista.
Vocación pedagógica
Más allá del tablero, Naroditsky dejó una huella en la difusión del ajedrez al gran público. Era habitual verlo en plataformas de transmisión como YouTube y Twitch; allí compartía partidas, análisis y enseñanza, ganándose una base significativa de seguidores.
También publicó columnas en el diario The New York Times y fue autor de libros especializados en ajedrez desde su adolescencia.
Jugadores destacados, como el gran maestro Hikaru Nakamura, expresaron su impacto: “Le encantaba transmitir y le encantaba intentar ser educativo. El mundo del ajedrez está muy agradecido”, declaró Nakamura.