Detuvieron a un reportero argentino mientras transmitía en vivo desde Israel
Julián Obaya vivió un momento muy tenso cuando intentaba reportar desde Israel para un programa matutino de su canal, TN.

“Hoy a la mañana Julián vivió una situación de mucha tensión, nos habíamos dispersado momentáneamente, cosa que no hay que hacer, pero a veces en el afán de la cobertura...”, contó Nelson Castro en diálogo con Arriba Argentinos.
“Esto también está indicando el ambiente de guerra que se está viviendo. Hoy lo detuvieron y afortunadamente la transmisión en vivo que estábamos haciendo en ese momento por TN evitó que tuviera un inconveniente mayor”, sumó.
“Como decía Nelson, nos dispersamos, son jornadas de trabajo muy largas, tenemos 6 horas de diferencia, yo tenía que hacer una salida para Re Despiertos, un programa que va muy temprano por TN, para no despertar a Nelson y al camarógrafo dije: bueno, ‘salgo con con mi teléfono’, que muchas veces lo hacemos, y en un momento empiezo a caminar y a una cuadra y media del hotel, no me doy cuenta, y estaba estaba con el teléfono grabando y sale una persona armada de adentro del colegio y me pregunta por qué estaba sacando fotos”, relató luego Julián Obaya.
Máxima tensión cuando le apuntaron con un arma
“Le digo que era periodista, me dice ‘¿dónde está la credencial?’, la credencial yo la tengo en el teléfono, cuando saco el teléfono se aleja y agarra el arma y me dice ‘no toques nada, quédate ahí'. Bueno, obviamente me pongo bastante nervioso pero trataba de no demostrarle eso... Yo quería demostrarle en todo momento que no era ninguna amenaza para él y bueno... en un momento él se aleja, me dice que me quede en el lugar”, explicó.
“A los tres o cuatro minutos bajan de una camioneta policías con armas muy largas, yo trataba de explicarles que estaba en vivo para televisión de Argentina, entonces me voy al canal de YouTube de TN y empiezo ir para atrás como para mostrarle mi imagen, a todo esto le digo al productor que le avise a Nelson ‘decile que estoy una cuadra del Hotel’”, recordó.
“El policía me agarra el teléfono y me empieza a mirar las fotos, ve fotos de la cobertura, me empiezan a preguntar de dónde venía... todo muy largo, duró unos 20 o 25 minutos. Y después me entero que era un colegio, yo no pensé que podía significar una amenaza”, sumó. /La Voz