Texas bajo agua: tormentas eléctricas lentas provocan nuevas inundaciones y evacuaciones
Las lluvias intensas y sostenidas provocaron el desborde de ríos en el centro del estado. Hay órdenes de evacuación, emergencia por inundaciones y operaciones de rescate en curso.
El centro de Texas volvió a quedar bajo alerta este domingo, a poco más de una semana de las trágicas inundaciones del 4 de julio que dejaron más de 100 muertos. Esta vez, el peligro llegó con tormentas eléctricas de lento desplazamiento, que descargaron lluvias torrenciales durante varias horas, provocando inundaciones repentinas, crecidas peligrosas y evacuaciones forzadas en zonas como San Saba y Kerrville.
En el sureste del condado de San Saba, se declaró emergencia por inundación súbita, con registros de entre 150 y 200 mm de lluvia en apenas seis horas. Las autoridades ordenaron evacuaciones obligatorias en varias localidades, mientras que el Centro Cívico local fue habilitado como refugio. El juez del condado, Jody Fauley, advirtió que el nivel del agua había superado los 9,3 metros y seguía en ascenso.
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) pronosticó que el río San Saba alcanzará la categoría de “inundación grave”, superando los 9,4 metros de altura. “Las lluvias están provocando un rápido aumento del nivel del río desde Menard hasta San Saba”, indicaron desde el organismo.
En Sutton, las inundaciones dejaron vehículos varados en la Interestatal 10, y el agua se acercó peligrosamente a zonas residenciales. Mientras tanto, Kerrville permanece bajo alerta de inundación hasta el lunes por la mañana, con el río Guadalupe muy cerca del nivel crítico.
Las autoridades suspendieron momentáneamente las operaciones terrestres de búsqueda y rescate en Kerrville, debido al riesgo de nuevos desbordes, aunque ya se han reanudado.
El NWS de San Antonio aclaró que “aunque la probabilidad de más impactos graves es baja (10-20%), se mantiene el monitoreo constante por precaución en las cuencas de los ríos Guadalupe, Colorado y San Gabriel”.
Desde el Centro de Predicción Meteorológica, se advirtió que “los ríos con aguas turbulentas como el Guadalupe deben evitarse en lo posible”. Además, los equipos de CNN en Kerrville recibieron alertas de emergencia en sus teléfonos que advertían:
“Esta es una situación peligrosa y potencialmente mortal. No intente desplazarse, salvo que esté huyendo de una zona de riesgo o bajo una orden de evacuación”.
Las condiciones seguirán siendo inestables hasta el lunes. La situación, una vez más, pone a prueba la capacidad de respuesta de las autoridades y reactiva el temor en una región que aún no logra reponerse del desastre anterior.