Con la camiseta de Barcelona sobre su torso, un joven corrió al menos 50 metros hasta el medio de la cancha del estadio donde Inter Miami venció a Los Ángeles FC. Su objetivo, tal como delataba su vestimenta, con el número 10 en la espalda, era llegar hasta Lionel Messi. Sin embargo, pese a su esfuerzo, el intruso no logró cumplir su misión y en gran parte fue porque Yassine Cheuko, el guardaespaldas del rosarino, detuvo su camino centímetros antes de alcanzar a su ídolo.

La imagen, que se viralizó en las redes sociales, muestra al encargado de seguir a Messi a sol y a sombra desde su arribo a Miami cuando toma por la parte superior del cuerpo a quien buscaba, se presume, abrazar al "10". 

Según el tablero del estadio, iban 72 minutos de juego cuando sucedió este episodio.El astro rosarino, quien ya había bajado un par de cambios en el encuentro, pero seguía siendo el imán de todo lo que sucedía, observó la situación con la calma que lo caracteriza en este tipo de demostraciones del público. Afortunadamente, la cosa no pasó a mayores. Personal de seguridad del estadio se acercó rápidamente al joven y lo sacó de la cancha. El partido continuó e Inter Miami pudo terminar de moldear un importantísimo triunfo.