Luego de la dolorosa derrota 2-1 en la final de la Copa Libertadores ante Fluminense en Brasil, el plantel de Boca arribó a suelo argentino este domingo tras aterrizar en Ezeiza alrededor de las 19 horas en el vuelo proveniente de Río de Janeiro.

Una gran cantidad de hinchas aguardaron por los futbolistas para brindarles su apoyo en el aeropuerto, mientras otro grupo se trasladó al predio que tiene el club a pocos metros.