El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, criticó duramente a su homólogo argentino, Javier Milei, y le exigió una disculpa tanto a él como a su país. "Dijo muchas tonterías", afirmó Lula, refiriéndose a declaraciones pasadas del libertario.

El mandatario brasileño destacó la importancia de las relaciones entre Brasil y Argentina, y expresó su deseo de que ambos pueblos vivan en paz, independientemente de las tensiones políticas.

"No conversé con el presidente de Argentina porque creo que él debe pedirle disculpas a Brasil y a mí. Dijo muchas tonterías. Sólo quiero que él pida disculpas", reiteró Lula en una entrevista. Aseguró que el vínculo entre ambos países es más importante que las diferencias entre sus líderes.

El Gobierno de Javier Milei, por su parte, respondió a través del vocero presidencial, Manuel Adorni, quien rechazó la necesidad de pedir disculpas. "No hemos cometido nada de lo que haya que arrepentirse", afirmó Adorni en su habitual conferencia de prensa, defendiendo las acciones y declaraciones del presidente Milei y minimizando la polémica.