Conflicto universitario: los docentes de Tucumán harán un paro por 48 horas
El Frente Sindical, que reúne a los empleados docentes y no docentes de las principales casas de estudios del país, lanzaron la medida de fuerza para este 17 y 18 de marzo
El paro de este lunes 17 y martes 18 de marzo se perfila como el primer episodio de la segunda temporada del conflicto universitario, cuya trama quedó sin resolver en 2024. El deterioro de los salarios de docentes e investigadores, la reducción de las becas para estudiantes, la parálisis de las obras de infraestructura, el desfinanciamiento del sistema científico y tecnológico y la desactualización de los gastos de funcionamiento componen una agenda de reclamos que motivó el año pasado dos marchas federales masivas.
“Sin Ley de Presupuesto para 2025, las universidades quedan otro año más sin un horizonte presupuestario claro y con ello se afectan aspectos sustantivos como el desarrollo de proyectos académicos, la investigación, el sostenimiento del sistema de becas para estudiantes y, en general, se pone en riesgo el funcionamiento básico de las universidades”, sostuvieron desde la Conadu.
La decisión se formalizó en una asamblea del Frente Sindical, en la que participaron representantes de: la Federación Nacional de Docentes, Investigadores y Creadores Universitarios (Conadu Histórica), la Federación Nacional de Docentes Universitarios (Conadu), la Federación de Docentes de las Universidades (Fedun), la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera), la Asociación Gremial de Docentes de la Universidad Tecnológica Nacional (Fagdut), la Federación Argentina del Trabajador de las Universidades Nacionales (Fatun) y la Unión Docentes Argentinos (UDA).
En Tucumán, ADIUNT aseguró que se sumarán a la medida. "Hace años que nuestro salario pierde la carrera frente a la inflación. En diciembre de 2023 y enero de 2024, con una inflación de 25% y 20%, no hubo aumento salarial por parte del gobierno de Milei. En los meses siguientes, sin discusión en Paritarias, el gobierno impuso porcentajes irrisorios de 1% o 2%, un insignificante aumento. En enero y febrero de 2025 los "aumentos” fueron 1,5% y 1,2% respectivamente", señala el comunicado.
Paro universitario por 48 horas: qué reclaman los gremios
Uno de los principales reclamos de los gremios es la pérdida salarial de los trabajadores universitarios. El Frente Sindical denunció que los incrementos salariales otorgados por la Subsecretaría de Políticas Universitarias (SSPU) son insuficientes para compensar la inflación y el deterioro del poder adquisitivo.
En detalle, se ofreció un aumento de 1,5% para enero y de 1,2% para febrero, cifras que, según los sindicatos, no logran revertir la caída salarial registrada durante 2024.
Además, señalaron que el presupuesto prorrogado es uno de los principales factores que agravan la situación de las altas casas de estudios. “El desfinanciamiento de las universidades nacionales se constituye en un grave problema que la comunidad universitaria y la sociedad en general enfrenta”, remarcaron.
“Llamamos a todos los sectores de la sociedad, tanto al público como al privado, organizaciones sindicales, sociales, políticas, a pronunciarse y apoyar las acciones en defensa de la Universidad Pública con salarios dignos”, comunicó la Federación Nacional de Docentes Universitarios.
Un escenario incierto
Desde la Subsecretaría de Políticas Universitarias aseguraron a Infobae que el diálogo es permanente con todos los actores del sistema: rectores, docentes, sindicatos y autoridades estudiantiles. “Hemos trabajado para sacar el conflicto de la calle y traerlo de nuevo al ámbito donde las discusiones se tienen que dar. No es necesario estar de acuerdo en todo, pero sí en algunas cosas mínimas pensando en los estudiantes, y el ámbito para ponerse de acuerdo es discutir en torno a una mesa”, señalaron fuentes de la Subsecretaría.
“Obviamente, por la alta politización dentro de las universidades, es imposible que las casas de altos estudios se mantengan aisladas del proceso político del país. Sin embargo, tenemos la esperanza de que podamos aislar los temas estratégicos y fundamentales para que no se vean implicados en la discusión electoral, que no debería afectar el proceso académico”, dijeron fuentes de la subsecretaría a cargo de Alejandro Álvarez.
Desde el CIN también afirmaron que “debe primar el diálogo y el consenso”. Y expresaron: “Consideramos imprescindible la unidad nacional por sobre la cultura de la provocación y el conflicto, para construir un proyecto de país independiente y solidario”. Además, sostuvieron que “en un mundo en el que el conocimiento es presente y futuro, es inconcebible e imperdonable no invertir en educación como país”.
¿Cómo será este 2025? Rectores, sindicatos y representantes estudiantiles coincidieron en plantear un escenario de incertidumbre. “Nuevo año, los mismos problemas”, se titula el comunicado que los rectores nucleados en el CIN difundieron esta semana, luego de anunciar que las 61 universidades públicas abrieron sus instalaciones como centros de acopio, logística y distribución de donaciones para Bahía Blanca.
En el comunicado, los rectores señalaron que la falta de un presupuesto para 2025 “significa que el Poder Ejecutivo Nacional puede disponer discrecionalmente, sin ningún tipo de control, de los fondos que surgen del pago de los impuestos que realiza cada argentina y cada argentino. De esta forma, el país no cuenta con una hoja de ruta que garantice el funcionamiento económico y financiero de las instituciones del país”.
Los rectores denunciaron que, en este contexto, “el sistema universitario público argentino atraviesa una seria situación de desfinanciamiento en todos los ámbitos de su desempeño institucional. Los problemas que señalamos en febrero de 2024 continúan e, incluso, en varios aspectos se han agravado”.
La magnitud del ajuste realizado en 2024 generó que los principales actores del sistema universitario –el CIN, que nuclea a los rectores de todo el país; el Frente Sindical, que reúne a todos los gremios; y la Federación Universitaria Argentina (FUA), que representa a todos los centros de estudiantes– coordinaran sus acciones y convocaran en conjunto a las dos marchas de abril y octubre. Este año apuntan a mantener esa coordinación.
“Los reclamos de la marcha federal de octubre se mantienen y se avizora un año complejo. No vemos que desde el Gobierno haya intención de resolver la cuestión de la actualización salarial y de los gastos de funcionamiento. También nos parece importante destacar la situación de las becas Progresar de nivel superior. No sabemos cuál va a ser el monto ni cómo será la inscripción. Tampoco existe un canal para comunicarse. Hay una política de vaciamiento”, planteó Joaquín Carvalho, presidente desde febrero de la FUA, de extracción radical.
Si bien por ahora no prevén convocar a una tercera marcha federal, desde las universidades retomaron una discusión que había comenzado el año pasado: la posibilidad de insistir con una Ley de Financiamiento Universitario, pero esta vez avalada por una consulta popular vinculante, para que el presidente Javier Milei no pueda vetarla como lo hizo en 2024.