Alberto Fernández, más cerca de ir a juicio por violencia de género contra su expareja
El fiscal federal, a cargo de la causa contra el expresidente por hechos vinculados a la denunciante, cerró la instrucción y propuso avanzar a la siguiente fase del juicio
En el transcurso de diez meses desde la denuncia formulada por Fabiola Yañez contra el expresidente Alberto Fernández, por presuntos actos de violencia de género, el fiscal federal Ramiro González ha dado por concluida la fase de investigación. En su dictamen, el fiscal ha señalado que se han cumplido las diligencias necesarias, lo que permite avanzar hacia un posible juicio oral.
Las acusaciones incluyen delitos de violencia física, psicológica y económica, que podrían acarrear penas de entre 3 y 18 años de prisión, tal como lo establece el procesamiento del juez Julián Ercolini, ratificado en abril por la Cámara Federal de Buenos Aires. Durante la presentación del dictamen, se destacó que, a pesar de que las partes pudieran considerar la necesidad de más pruebas, el Ministerio Público Fiscal considera que ya se han materializado las pruebas pertinentes.
En este contexto, se han iniciado los trámites para notificar a las partes involucradas, tanto la defensa de Alberto Fernández como la querella, sobre la posibilidad de elevar el caso a juicio. Esto implica que, tras la ronda de consultas, se definirá el envío del expediente a un tribunal oral. El cierre de la etapa de instrucción ha permitido al fiscal solicitar la opinión formal de Yañez, la denunciante, quien ha mantenido su acusación de manera constante desde el inicio del proceso. Se anticipa que su respuesta será favorable a que el caso sea llevado a juicio.
Posteriormente, González evaluará dicha respuesta y, en función de ello, procederá con el requerimiento de elevación a juicio ante el juez Ercolini, quien tendrá la última palabra sobre el avance del caso. Este proceso judicial adquirió relevancia significativa en abril de este año, cuando la Cámara Federal de Buenos Aires confirmó el procesamiento de Fernández por diversos delitos relacionados con violencia de género.
Los jueces resaltaron que existió una "desigualdad de poder" en la relación y que la víctima sufrió un deterioro en su salud mental y física como consecuencia de la dinámica de violencia habitual. A su vez, el juez Ercolini había impuesto restricciones severas a Fernández, incluyendo un embargo de sus bienes y la prohibición de acercarse a Yañez, lo que subraya la gravedad de las acusaciones y la necesidad de un análisis judicial exhaustivo.