Un nuevo episodio de violencia vinculado al fútbol ocurrió en Liniers tras el triunfo de Vélez ante Peñarol por la Copa Libertadores. Barras del club agredieron a un grupo de policías que jugaban un picado en una cancha del barrio. El saldo fue de 21 detenidos: 14 de ellos identificados como integrantes de la barra brava de Vélez, y los otros siete, policías que participaban. 

Al parecer uno de los policías llevaba puesto un pantalón corto de Peñarol, presuntamente sin saber que el equipo uruguayo se presentaba en el estadio José Amalfitani. A la salida, los barras de Vélez lo descubrieron y se originó una pelea. Los violentos atacaron a los policías y, cuando la pelea se había extendido en diversos sectores de la cancha, uno de los oficiales disparó al aire para disuadir. 

El violento hecho fue controlado tras la llegada de agentes del Despliegue de Intervenciones Rápidas (DIR), mientras que la causa quedó a cargo de la División Intervenciones Judiciales de la Policía Federal Argentina.

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