El avance en la causa por la muerte del fiscal Alberto Nisman tuvo un nuevo capítulo este miércoles, cuando el juez Julián Ercolini imputó al juez Manuel De Campos y a la exfiscal Viviana Fein. Ambos fueron señalados por su actuación en la escena del crimen, considerada un verdadero “desastre” por la investigación en curso.

La resolución judicial responde a un pedido formulado por el fiscal federal Eduardo Taiano, que apuntó a irregularidades graves en las primeras diligencias realizadas en el departamento de Puerto Madero. El fiscal Taiano señaló que las pruebas que debían recolectarse y preservarse fueron, en cambio, destruidas o alteradas en el lugar del hallazgo. “La desidia con la que actuaron los magistrados impactó de manera directa en el curso de la investigación del homicidio del doctor Nisman”, sostuvo Taiano en su presentación.

Caso Nisman: imputaron a la exfiscal Viviana Fein por irregularidades

Según el escrito fiscal, las fallas no se limitaron a omisiones técnicas sino que afectaron la integridad de la escena y la cadena de custodia. Entre las anomalías que motivaron la imputación figura la ausencia de huellas del propio Nisman en su departamento y, en contraste, la detección de la marca dactilar de un prefecto que debía preservar la escena. Ese hallazgo, según la acusación, evidencia la falta de control y la posible alteración del lugar del hecho, lo que complicó la posterior recolección de pruebas y la identificación de eventuales responsables.

Con estas imputaciones, la investigación suma un nuevo eje procesal que compromete a quienes tenían la responsabilidad de garantizar la transparencia y legalidad del procedimiento. La causa continúa abierta y las medidas solicitadas por el Ministerio Público Fiscal buscan determinar responsabilidades penales y administrativas entre los funcionarios involucrados.

Caso Nisman: imputaron a la exfiscal Viviana Fein por irregularidades

Para la Justicia, estas fallas iniciales resultaron determinantes. No sólo impidieron avanzar con una recolección adecuada de evidencias, sino que también dejaron serias dudas sobre la cadena de custodia y la posibilidad de identificar a los responsables de la muerte del fiscal.

Con estas imputaciones, la investigación sobre el encubrimiento y las irregularidades en la escena del crimen de Nisman suma un nuevo eje que compromete directamente a quienes debían garantizar la transparencia y legalidad del proceso.