El delegado comunal de la localidad de El Cercado, Carlos Juárez, quedó en prisión preventiva hasta el viernes 19 de septiembre tras haber reconocido que atropelló y mató a Silvia Robles, de 62 años, y la abandonó en lugar de asistirla.

El hecho ocurrió el jueves por la noche, cuando el funcionario salía de una fiesta por el Día del Maestro a bordo de su camioneta VW Amarok, se cree en estado de ebriedad. Tras embestir a la mujer, que circulaba en bicicleta por la ruta 325, la abandonó en el sitio. Un camionero vio el siniestro y se bajó del vehículo para asistir a la mujer, pero nada pudo hacer por salvar su vida. De inmediato, salió de una casa cercana otra mujer que conocía a Silvia Robles y escuchó el relato del camionero. La víctima falleció en el lugar.

Horas más tarde, el delegado comunal se presentó en la comisaría para relatar lo ocurrido, pero sin la camioneta con la que la atropelló. Lo hizo en compañía de su hermano y, en un primer momento, intentó confundir a los empleados policiales asegurando que quien manejaba la camioneta que mató a la mujer era su hermano.

Este hecho, aseguró el fiscal César Larry, ocurrió en su presencia y en la de al menos diez policías. Más tarde, el delegado comunal reconoció que había sido él quien atropelló a la mujer. Sin embargo, uno de sus abogados defensores aseguró que el fiscal “mentía”, ya que quien intentó atribuirse la culpa fue el hermano del acusado por motu proprio. El fiscal sostuvo su versión: “nadie me lo contó, lo viví personalmente”, insistió, y reafirmó que fue el imputado quien trató de inculpar a su hermano.

El personal médico que revisó al acusado advirtió que tenía aliento con olor a alcohol y le realizó una prueba de sangre, cuyo resultado todavía no está listo.

La fiscalía pidió que el delegado comunal quede en prisión preventiva por 30 días para evitar que, al tratarse de una persona con mucho poder en el pueblo, pueda influir en testigos. El juez Matías Graña entendió que, para garantizar el avance de la investigación, era necesario que Juárez quede privado de su libertad, pero solo hasta el viernes, aunque ese período puede prorrogarse.

La sorpresa durante la audiencia ocurrió cuando una de las hijas de la víctima, tras pedir justicia por su madre, indicó que Silvia Robles conocía al acusado y le tenía aprecio. Más tarde, el propio comisionado comunal admitió también que conocía a la víctima, pidió perdón a su familia y manifestó estar profundamente consternado por lo que hizo. Juárez, de esta manera, enfrenta una pena de entre tres y seis años de prisión.