Escándalo en un clásico salteño: un jugador sacó un cuchillo y quiso apuñalar a un rival
El clásico entre San Antonio y Barrio Obrero terminó con violencia: empujones, golpes y la aparición de un arma blanca en el campo de juego.
En una tarde que prometía ser celebratoria, el clásico entre San Antonio y Barrio Obrero, disputado en el estadio José Zigarán, se transformó en un evento marcado por la violencia y el caos. Este encuentro, que corresponde a una nueva fecha del certamen regional de la Liga Anteña de Fútbol, se tornó cada vez más tenso a medida que avanzaba el partido. Las reiteradas faltas y la acumulación de disputas entre los jugadores fueron escalando, generando un ambiente de creciente hostilidad.
Al finalizar el encuentro, la situación se tornó incontrolable, desatándose lo que se podría calificar como una batalla campal. En el campo de juego, los empujones y las trompadas se multiplicaron, mientras que el árbitro y los cuerpos técnicos intentaban, sin éxito, restablecer el orden. En medio de esta vorágine, un incidente particularmente grave tuvo lugar: un jugador del equipo de San Antonio extrajo un cuchillo, intentando agredir a un adversario de Barrio Obrero. Este acto inesperado provocó el pánico entre los espectadores y los jugadores, quienes presenciaron con horror la escena. Afortunadamente, la situación fue contenida gracias a la rápida intervención de algunos allegados, quienes evitaron que el uso del arma resultara en heridos.
A pesar de la magnitud del altercado, no se registraron lesiones de gravedad. Sin embargo, las imágenes de un jugador empuñando un cuchillo en un contexto de liga amateur han dejado una profunda impresión en la comunidad deportiva del departamento de Anta. Este episodio ha puesto de relieve la creciente preocupación por los niveles de violencia en el fútbol local, una problemática que requiere atención y acciones concretas por parte de las autoridades y de la organización del deporte en la región.
La Liga Anteña de Fútbol ya ha comenzado a investigar los hechos, mientras que la intervención de la Policía se ha vuelto necesaria para abordar la situación y prevenir que incidentes similares vuelvan a ocurrir en el futuro.