El fútbol tucumano vivió un incidente de violencia extrema. Este evento se desencadenó tras la derrota de San Martín ante Gimnasia y Tiro en Salta, cuando un grupo de supuestos hinchas generó destrozos en las cercanías del Estadio La Ciudadela. La situación escaló cuando estos individuos atacaron la vivienda de la madre de Ariel Martos, exentrenador del equipo. A pesar de la gravedad de los hechos, hasta el momento no se ha registrado ninguna denuncia formal. 

Sin embargo, la Policía de Tucumán ha decidido iniciar una investigación de oficio. Joaquín Girvau, jefe de la fuerza policial, mencionó que "no es la primera vez que hay problemas con la hinchada de San Martín" y aseguró que se tomarán las medidas necesarias para erradicar la violencia. Fuentes cercanas a la comisión directiva del club informaron que el ataque fue llevado a cabo por un grupo reducido con intenciones de forzar la salida de Martos como director técnico. 

El club ha manifestado su intención de presentar una denuncia formal ante la Justicia, asegurando que tienen suficientes elementos para identificar a los agresores, incluyendo imágenes de las cámaras de seguridad que registraron la patente del vehículo. En este contexto, la Policía también está intentando localizar a Martos para que aporte su versión sobre lo sucedido. Este hecho no solo representa un grave altercado, sino que pone de manifiesto un alarmante nivel de violencia que puede repercutir en el futuro del fútbol en la provincia.