Tafí Viejo: un cazador furtivo será investigado por montar una cacería con una especie protegida
El acusado posó en una fotografía junto a siete cadáveres de ejemplares de un animal en peligro de extinción, lo que derivó en que la Dirección General de Delitos Rurales tomara cartas en el asunto
En la ciudad de Tafí Viejo, se ha generado un fuerte revuelo tras la difusión de una fotografía que exhibe a un hombre posando con siete cadáveres de corzuela, una especie protegida en el país. Esta situación ha derivado en una investigación judicial que ha culminado con un allanamiento en el domicilio del individuo, identificado como Adrián Barrionuevo, quien se encuentra detenido. Durante el operativo, la Dirección General de Delitos Rurales ha confiscado diversos elementos, incluyendo municiones y cuchillos, que se presume estaban destinados a la caza ilegal.
La investigación se inició luego de que la imagen se viralizara a través de la aplicación WhatsApp, lo que alertó a las autoridades sobre la actividad de caza furtiva. La fotografía muestra a Barrionuevo armado junto a los animales, que se cree fueron cazados durante la noche utilizando métodos prohibidos como miras telescópicas y reflectores. La legislación argentina, a través de la Ley Nacional N.º 22.421 y la Ley Provincial N.º 6.292, establece restricciones claras sobre la caza de especies protegidas y prohíbe la utilización de ciertos métodos de caza.
La corzuela, un ciervo de tamaño pequeño a mediano, es nativa de América del Sur y Central y se encuentra en peligro debido a la caza indiscriminada y la pérdida de su hábitat. La preocupación por la conservación de esta especie ha llevado a que las autoridades tomen medidas enérgicas contra la caza ilegal. El caso ha sido tomado por la Dirección General de Delitos Rurales, que enfatiza el impacto negativo que estas prácticas tienen sobre la biodiversidad local.
Además de la detención de Barrionuevo, durante el operativo se arrestó a su hermana, quien intentó interferir en el trabajo de las fuerzas de seguridad. La causa avanza en los tribunales, donde se determinará la responsabilidad penal de los implicados. La caza ilegal de especies protegidas no solo es un delito, sino que también representa una amenaza significativa para los ecosistemas, lo que ha llevado a un llamado a la acción por parte de las autoridades para proteger la fauna silvestre.