as lluvias registradas en los últimos días en la provincia provocaron el desborde de ríos y canales, afectando la transitabilidad en distintas localidades del departamento Simoca. Si bien los trabajos preventivos del programa Pre-lluvia lograron mitigar parte del impacto, desde el Gobierno provincial advirtieron que la situación se ve agravada por la tala indiscriminada en el pedemonte, el desmonte para emprendimientos inmobiliarios y la descarga de agua de riego en los caminos.

Para abordar esta problemática y poner en marcha acciones concretas, el Ministro del Interior, Darío Monteros, encabezó una reunión de trabajo en Atahona junto al Ministro de Obras Públicas, Marcelo Nazur; el intendente de Simoca, Elvio Salazar; los legisladores del departamento Simoca, Cacho Gómez y Marcelo Herrera; representantes de la Dirección de Vialidad y de la Dirección Provincial del Agua; supervisoras de zona y comisionados comunales de Atahona, Villa Chicligasta, San Pedro y San Antonio, Santa Cruz y La Tuna, Río Chico y Nueva Trinidad, y Monteagudo.

En el encuentro, Monteros subrayó que no solo las lluvias impactan en la red vial, sino que la acción humana contribuye a agravar el problema. “El desmonte y la deforestación descontrolada generan consecuencias que después se ven reflejadas en caminos intransitables, inundaciones y poblaciones aisladas. A esto se suma la práctica de algunos productores que vierten agua de riego en los caminos, agravando aún más la situación”, sostuvo el funcionario.

En este sentido, remarcó que el Gobierno provincial está actuando de manera inmediata para restablecer la conectividad y garantizar que las comunidades afectadas puedan volver a su rutina con normalidad. “No nos quedamos en el diagnóstico: nos ponemos a trabajar. Cada camino que se recupera es una comunidad que se reconecta, un trabajador que puede llegar a su puesto y un estudiante que puede asistir a la escuela”, afirmó.

Desde el Ministerio del Interior destacaron que los trabajos ya están en marcha y que la prioridad es garantizar que las clases comiencen con los caminos en condiciones. “No hay pueblo ni paraje que quede solo frente a la adversidad. El gobierno de Osvaldo Jaldo está presente, dando respuestas concretas y defendiendo al interior, porque sabemos que es el motor de nuestra provincia”, concluyó Monteros.