Con más del 95% de las mesas escrutadas, el resultado de las elecciones nacionales legislativas de 2025 exhibe una victoria contundente para el espacio oficialista: La Libertad Avanza obtuvo el 40,81% de los votos para la Cámara de Diputados, mientras que el peronismo, que compitió bajo el sello Fuerza Patria y otras variantes provinciales, alcanzó alrededor del 31,6%.

El mapa electoral refleja una dispersión regional que explica en buena medida la amplitud del triunfo: el oficialismo se impuso en 16 provincias, entre ellas la más relevante por su peso demográfico, la provincia de Buenos Aires. Allí, la lista encabezada por Diego Santilli obtuvo 41,53% frente al 40,84% del peronismo, un giro notorio si se considera que en las elecciones locales celebradas hace mes y medio el peronismo había sacado una diferencia de 14 puntos. Ese vuelco en la principal jurisdicción del país resultó determinante para consolidar la mayoría relativa del oficialismo a nivel nacional.

Las legislativas pueden leerse como 24 elecciones provinciales simultáneas. La Libertad Avanza se alzó con la primera minoría en distritos diversos por su geografía y perfil socioeconómico: Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), Buenos Aires, Chubut, Corrientes, Córdoba, Entre Ríos, Jujuy, La Rioja, Mendoza, Misiones, Neuquén, Río Negro, Salta, San Luis, Santa Fe y Tierra del Fuego. Por su parte, Fuerza Patria y sus aliados provinciales se impusieron en Catamarca, Formosa, La Pampa, San Juan, Santa Cruz y Tucumán.

En la Cámara de Senadores también hubo cambios relevantes: de las ocho provincias que renovaban bancas, el oficialismo ganó seis (CABA, Chaco, Entre Ríos, Neuquén, Santa Fe y Tierra del Fuego). Ese resultado le permitirá equilibrar fuerzas en una cámara que hasta ahora le había sido más esquiva y modificar, en los hechos, las posibilidades de negociación legislativa del Ejecutivo en lo que resta de mandato.

Los datos parciales y la distribución territorial de los votos muestran un fenómeno de reconfiguración electoral, con distritos tradicionalmente favorables al peronismo que se vuelcan hacia la propuesta oficialista y con una fragmentación opositora que favorece la acumulación de sufragios del Gobierno en múltiples plazas. El análisis definitivo requerirá el escrutinio total y la lectura de cómo se traducen estos porcentajes en bancas, así como la incorporación de factores como alianzas provinciales, el desempeño en secciones electorales clave y la dinámica de la campaña hacia los comicios presidenciales siguientes.