Jaldo tras las amenazas: “Vamos a desbaratar hasta el último kiosco de droga en Tucumán”
Según información judicial, el sábado pasado, mientras el peligroso delincuente Javier “Chucky” Casanova era trasladado con prisión preventiva al penal de Benjamín Paz, familiares habrían publicado amenazas en redes sociales dirigidas al gobernador en uso de licencia, al jefe de Policía y al jefe de la Unidad Regional Norte.
El gobernador en uso de licencia, Osvaldo Jaldo, se refirió en una entrevista con Omar Noblega en Los Primeros, a las amenazas recibidas tras la detención y traslado al penal de Benjamín Paz de Javier “Chucky” Casanova, un delincuente con un amplio historial delictivo. Las intimidaciones, presuntamente realizadas por familiares del detenido, fueron difundidas a través de redes sociales. “Desde el primer día fuimos claros: vinimos a poner orden y lo estamos cumpliendo a rajatabla porque se acabó la impunidad (de los delincuentes) en Tucumán”, afirmó.
Jaldo atribuyó las amenazas que ha recibido en las últimas semanas a los avances concretos de su gobierno en la persecución del delito, particularmente del narcotráfico y las estructuras mafiosas que, según denunció, gozaban de impunidad en gestiones anteriores. “Mientras ellos paseaban, los tucumanos se encerraban con rejas. Eso se terminó”, subrayó.
"Caiga quien caiga"
El mandatario explicó que los operativos que se vienen desplegando en la provincia han derivado en allanamientos masivos, detenciones, secuestros de droga, dinero, armas de guerra, vehículos de alta gama y más. “Vamos por los delincuentes y por los bienes de los delincuentes, y también por los bienes de sus parientes, que son cómplices directos de las actividades delictivas”, advirtió.
Además, aseguró que algunos de los detenidos más peligrosos ya fueron trasladados a la cárcel de Benjamín Paz, y otros serán enviados a unidades de máxima seguridad fuera de la provincia. “No nos vamos a quedar con los soldaditos. Vamos a desbaratar hasta el último kiosco y llegar hasta los grandes”, prometió.
Refuerzo en la frontera
Otro de los ejes centrales de la entrevista fue el control en los pasos fronterizos de Tucumán, especialmente en el norte provincial. Jaldo recordó la implementación del Operativo Lapacho, que cubre los más de 20 pasos oficiales y clandestinos que conectan a Tucumán con Salta y Jujuy. “Cuando fallan los controles en esas provincias, tenemos nuestro propio filtro. Y allí venimos realizando secuestros millonarios de droga, vehículos y mercadería ilegal”, sostuvo.
El gobernador remarcó el trabajo coordinado con fuerzas federales, como Gendarmería y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), y con el respaldo constante del Poder Judicial. “Tenemos una policía profesionalizada, equipada y con tecnología de inteligencia criminal. A todos los tenemos detectados”, dijo.
“No me van a amedrentar”
Frente a la consulta sobre si modificará su agenda pública debido a las amenazas en su contra, Jaldo fue tajante: “No es la primera vez que me amenazan, y no va a ser la última. No me van a amedrentar. Vamos a seguir recorriendo cada rincón de Tucumán”.
Apoyado en estadísticas del Ministerio de Seguridad de la Nación, Jaldo aseguró que Tucumán está entre las tres provincias que más redujeron los homicidios en los últimos quince años. Y lanzó una crítica directa a sus antecesores: “Pregunten cuántas veces amenazaron a gobernadores anteriores. Ninguna, porque nunca se actuó con esta firmeza”.
Para Jaldo, la actual ofensiva contra el crimen organizado representa “un antes y un después”: “La policía toma todo el territorio, desde la comuna más pequeña hasta los barrios de San Miguel de Tucumán. Antes lo tenía la delincuencia, hoy lo tiene el Estado. Y vamos a fondo, caiga quien caiga”.