Jaldo valoró el mensaje presidencial y fue cauto con el presupuesto 2026
El mandatario tucumano reconoció la convocatoria del presidente Milei, pero sugirió que es importante analizar cómo se distribuirán las partidas en el proyecto de ley de leyes
El gobernador Osvaldo Jaldo brindó hoy declaraciones tras la inauguración del Centro Penitenciario de Benjamín Paz, referidas principalmente a la presentación del presidente Javier Milei por cadena nacional con motivo del envío del Presupuesto 2026 al Congreso. Jaldo dijo haber percibido “un presidente más tranquilo” y destacó la ampliación de la convocatoria a distintos sectores: “Habló de diputados, de senadores y de gobernadores. Antes, cuando los nombraban, era para alargar algún piropo. El presidente no puede gobernar solo”.
Señaló, sin embargo, que aún no puede opinar sobre el contenido del presupuesto porque “no sé la asignación de partidas” ni los anexos por provincia, y aclaró que la evaluación dependerá de la reacción de legisladores y gobernadores cuando se conozcan los detalles. “Sí me parece que es un mensaje un poquito más conciliador que veces anteriores”, añadió.
En relación con la relación entre la provincia y el Gobierno nacional, Jaldo sostuvo que Tucumán se ha acercado para contribuir al país: “Nos arrimamos al Gobierno nacional a ver qué granito podíamos poner para sacar adelante a la Argentina. Y si a la Argentina no le va bien, nos irá mal a todos”. Como ejemplo de cooperación, mencionó la apertura de sobres para obras en el aeropuerto Internacional Benjamín Matienzo.
También remarcó que las diferencias con el oficialismo nacional se circunscriben al proceso electoral y a las banderas políticas de cada sector, y pidió distinguir entre discursos partidarios y lo institucional: “Separemos la paja del trigo”. Sobre la situación económica, el mandatario expresó preocupación por el poder adquisitivo y el acceso al crédito: “Hasta que la gente no pueda llegar a fin de mes con el sueldo, hasta que la gente salga del endeudamiento, hasta que le saquen las tasas de interés que tienen esas tarjetas de crédito que son usurarias”. Afirmó que las tasas del 80% impiden la actividad productiva y consideró que las variables macroeconómicas, aunque con esfuerzo del Gobierno, están “lejos de resolverse”.
Reconoció, no obstante, que se consiguió cierto control de la inflación que “otros gobiernos nacionales no pudieron”, aunque cuestionó que ese control “no llegó a las góndolas” ni al bolsillo de los trabajadores. Respecto de la coparticipación y los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), Jaldo reclamó que los recursos lleguen con destino específico y que se respete la distribución por ley: “Los ATN no son de ellos. El impuesto a los combustibles líquidos no es de la Nación, es de las provincias”.
Solicitó la transferencia de lo que corresponde por coparticipación y reclamó la redistribución del 1% que, dijo, se descuenta a las provincias para que se reparta entre las 23 jurisdicciones —y si corresponde, también a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires—, pues consideró que CABA “es uno de los distritos más ricos del país y tanta falta no le hace” en comparación con las provincias del centro y norte del país.