En medio del escándalo desatado por la filtración de audios atribuidos a un exfuncionario —que denuncian un presunto circuito de coimas dentro del gobierno—, el presidente Javier Milei participó en un acto público acompañado por su hermana, Karina. Una de las grabaciones señala a la secretaria general de la Presidencia como integrante de ese supuesto sistema de recaudación ilegal, aunque el jefe de Estado no hizo referencia explícita a la polémica durante su intervención. Pese a ello, en su discurso rozó el tema al responder a las críticas de analistas que sostienen que al Poder Ejecutivo le faltaría “política” para gestionar esta clase de crisis.

En ese marco afirmó: “No es que al Gobierno le falte política; no le falta política, están los de enfrente que quieren romper todo”, dirigiendo la alusión al bloque kirchnerista y a las leyes recientemente aprobadas que, según la postura oficial, afectarían el equilibrio fiscal. El presidente dedicó además palabras de agradecimiento a Eduardo Eurnekian, fundador de Corporación América, y a otras autoridades con las que trabajó en la empresa. Relató que allí conoció a Guillermo Francos, a quien definió como “el mejor jefe de Gabinete de la historia”, y mencionó que actualmente Francos se ocupa de las negociaciones con lo que denominó “los orcos del Congreso”, a quienes acusó de ser “destituyentes que quieren romper el plan económico, romper el país, promoviendo proyectos que buscan romper el equilibrio fiscal aprobando cualquier tipo de barbaridades”.

La referencia a las grabaciones comprometedoras y la tensión política subyacente mantienen la escena pública en un clima de confrontación, con la oposición responsabilizando al oficialismo por posibles irregularidades y el gobierno respondiendo con explicaciones sobre supuestos intentos de desestabilización.