La Cámara de Diputados tuvo una sesión que se centra en la investigación del escándalo relacionado con las criptomonedas y que involucra a Javier Milei, presidente en funciones. Durante la interpelación al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, el diputado radical Pablo Juliano formuló una pregunta irónica que dejó al funcionario evidentemente descolocado. 

Esta intervención no solo generó un momento de incomodidad para Francos, sino que también provocó la ira de Martín Menem, quien se mostró claramente molesto por la situación, reflejando así las divisiones y tensiones que caracterizan el actual clima político en la Argentina.

"Señor ministro, ¿a usted Le gusta el mar o la montaña?", lanzó a su turno el diputado, generando desconcierto en el funcionario y derivando en la inmediata intromisión del presidente de la Cámara que le pidió "empezarlo seriamente", exponiendo que se trataba de una chicana.

Sin embargo, Juliano insistió con su pregunta y Menem estalló: "Diputado, ¿otra vez? En serio, estamos llevando esto en calma", exclamó levantando la voz, mientras Francos guardaba silencio.

En medio del escándalo, el legislador le dio una explicación a su intervención. "Capaz que quiera responder por las evasivas. Capaz el ministro quiere hablar de otra cosa porque no contestó nada de lo que se le preguntó", afirmó Juliano.

En ese marco, Menem reprochó que se trataba de "una falta de respeto", a lo que el radical retrucó: "Si hablamos de respeto, al pueblo argentino el respeto ya se le faltó cuando dos ministros convocados por este Congreso no están viniendo, y el jefe de Gabinete dice que él no tiene implicancias", sentenció el diputado.

Tras el retraso para que inicie la sesión, el funcionario exclamó: "Nunca en mi vida he hecho esperar a nadie dos horas", en referencia a la demora provocada por la ausencia de los ministros citados